Kevin Durant tiene varios motivos para estar contento y feliz. Primero, porque los Brooklyn Nets, equipo en el que 'juega' desde 2019, se han clasificado para los 'playoff'. Y segundo, porque eso le garantiza un buen aumento de dinero en su cuenta corriente.

El ex de los Golden State Warriors, gracias al trabajo de sus compañeros durante toda la temporada, se va a embolsar otro montante de un millón de dólares en un curso en el que no ha jugado ni un minuto.

No lo ha hecho porque se lesionó de gravedad en la final por el anillo del pasado año ante los Raptors. Después de ir recuperando su mejor versión, Durant se rompió el tendón de aquiles, lo que le ha tenido en el dique seco todo el curso.

Sin él, y sin Kyrie Irving (también lesionado), pocos apostaban por unos Nets que han llegado aún más en cuadro a la burbuja de Orlando.

Con todo, sus resultados, mirándolo en perspectiva, han sido incluso mejores que los cosechados en la última parte de la temporada regular de la NBA hasta su parón por la crisis del coronavirus.

Para asegurar los 'playoff', los Nets derrotaron por 119-106 a los Sacramento Kings.