La fotógrafa Ouka Leele ha fallecido este martes, un mes antes de cumplir 65 años, según han informado a Efe fuentes de la familia de la artista.

Bárbara Allende Gil de Biezma, conocida como Ouka Lele, ha muerto en un hospital de Madrid esta tarde tras una larga enfermedad, y sus restos mortales van ser trasladados al Tanatorio de San Isidro. Premio Nacional de Fotografía 2005 y Medalla de Plata de la Comunidad de Madrid, entre otros muchos galardones, Ouka Lele fue un miembro destacado de la Movida Madrileña.

Ouka Leele recibió el pasado 15 de mayo la Medalla de Madrid que concede el Ayuntamiento de la capital. Apasionada del color, se dio a conocer por sus fotos coloreadas a principios de los años ochenta y se convirtió en un referente y un miembro destacado de la Movida Madrileña

La artista expuso su obra no solo en nuestro país, también en Europa, Estados Unidos o Japón. Llegó a participar en la Bienal de Arte Contemporáneo de Sao Paulo (Brasil) en 1997 y tiene obra en instituciones como el Museo Reina Sofía, la Fundación La Caixa o la Colección ARCO. De su obra destaca el colorido de las mismas, aunque en un principio se decantó por la fotografía en blanco y negro.

"Desde muy pequeña he estado tocando el arte, pintando. La fotografía no la buscaba. De pequeña no me interesaba nada. De hecho, la primera cámara que tuve me la regalaron en la primera comunión, creo, y nunca la usé", afirmaba la artista en una entrevista con Efe en 2019. En ese encuentro, afirmaba también: "Me siento cómoda en todas las disciplinas artísticas en las que yo pueda dar algo. Creo que no es importante el medio, sino la finalidad".

La artista tomó su nombre artístico de una obra de "El Hortelano", otro artista de referencia de la Movida, donde aparecía un mapa de estrellas inventado por él y donde aparecía una estrella llamada así: Ouka Leele.

Fotógrafa porque su novio le impedía pintar

Nació en Madrid el 29 de junio de 1957, en el seno de una familia de la alta burguesía bilbaína, los Allende de Neguri. Su padre era Gabriel Allende Maíz, un prestigioso arquitecto enamorado de la pintura; su madre, Victoria Gil de Biedma, hermana del poeta Jaime Gil de Biedma. La artista era también prima segunda de la política Esperanza Aguirre.

Estudió dibujo en la academia Orsini, con la idea de matricularse en la Facultad de Bellas Artes, pero al final no llegó a ingresar en la Universidad. A los 19 años decidió coger la cámara fotográfica porque el novio que tenía entonces le prohibía pintar, según relataría a Efeminista en una entrevista en 2019. Algunas de sus fotografías fueron incluidas en el libro "Principio" (1976), que reunía a nueve jóvenes fotógrafos con futuro. También consiguió que sus obras aparecieran en revistas especializadas de la categoría de "Zoom" o "Nueva lente".

Ese mismo año conoció a dos personas que iban a ser claves en su vida, Ceesepe y José Alfonso Morera Ortiz, El Hortelano, dos jóvenes dedicados al cómic "underground". Aunque primero mantuvo una relación más estrecha con Ceesepe, luego estaría unos años casada con El Hortelano. En 1978 los tres amigos se instalaron en Barcelona durante tres años. Fue allí donde se le ocurrió la idea de pintar sus fotografías.

La revista "Star", publicación mítica dentro del mundo "underground", le pidió una foto en color para la portada y, como ella prefería el blanco y negro y nunca usaba el color, se decidió por una solución muy original; tomando como fuente de inspiración las viejas postales de principios de siglo, retoca a mano sus obras con acuarelas de fuertes colores dotando a la imagen de una fuerza sorprendente.

Después de superar problemas de salud por un linfoma a los 22 años, el éxito de Ouka Leele despertó con la llamada "movida" madrileña y fue elegida como fiel representante de lo que se llamó "posmodernidad". Sus obras encajaban perfectamente con el espíritu ecléctico de ese movimiento artístico. Su obra evoluciona y sorprende a crítica y público en cada nueva muestra.

Los fuertes colores "chillones" de sus primeras obras se fueron suavizando, los interiores dejaron de ser una constante en su obra y salió al exterior con su particular mirada a retratar bosques y plantas. Sus obras se sitúan a medio camino entre la pintura y la fotografía, son cuadros abstractos donde la composición cobra tanta importancia como el color.