Love of lesbian, el grupo indie por excelencia cerró su gira del Viaje Épico Hacia La Nada (V.E.H.N) por todo lo alto en el Wizink center, de Madrid. Lo hizo con un Santi Balmes de lo más reivindicativo que a lo largo del concierto repasó su largo recorrido en la música de la mano de toda su banda: Julián Saldarriaga, Jordi Roig y Oriol Bonet, y con himnos que marcaron a toda una generación.
Himnos como la 'Niña Imantada' no faltaron la velada, una canción que causó auténtica locura en el público, algo que la banda ya sabía. "Mucha gente la tiene tatuada y nos encanta", afirmó Santi Balmes.
Habló también la banda de sus inicios y de como decidieron poner como nombre al grupo ('Love of lesbian') en un momento en el que fueron totalmente incomprendidos y hoy, sin embargo, son aclamados y coreados por un Wizink que estaba a rebosar.
Balmes aprovechó también varios momentos del concierto para emitir mensajes muy potentes sobre la sociedad actual. No dudó por ejemplo en reivindicar las atrocidades que se están viviendo fuera en la guerra y pide que "ojalá los autores de tanto dolor paguen por los crímenes".
Después, camisa fuera como un auténtico rockstar de los 80, se metió al público en el bolsillo mientras ´rcoreaba sus éxitos. Tras consagrarse como estrella del indie español, Santi decidió sacar a Leiva. Lo hizo ya casi hacia el final del concierto para interpretar 'Incendios de Nieve' con un solo de guitarra espectacular y, entre gritos del público, los artistas anunciaron una futura colaboración de su próximo disco.
Llegando al final del concierto y tras varias despedidas, la banda interpretó 'Club de fans de Jhon Boy' y '1999' que no faltaron para el último bis. Como colofón final, como dijo el vocalista de la banda, no podían olvidar aquella canción que significó tanto para todos los que estaban allí. Esa canción que puso banda sonora a la vida de tantos y que cerró aquel Wizink de fin de gira con 'Allí donde solíamos gritar'.
Lo cuenta la escritora Celia Santos
El 'Plan Marta', el "cruel" programa de Franco y la Iglesia para repoblar Australia con mujeres españolas blancas
En los años 60, cientos de mujeres fueron enviadas a las antípodas con el objetivo de repoblar el país, como cuenta Celia Santos en la novela El país del atardecer dorado.