El consistorio ha conseguido en un año ahorrar unos 59.000 euros en su factura de energía tras cambiar la empresa de comercializadora del suministro a una nueva que ofrece energía 100% renovable. Además las bombillas de la ciudad han sido cambiadas por una nuevas con tecnología LED.
Estas medidas han supuesto que el consumo eléctrico en tan sólo un año se ha reducido en un 27,5% , superando las previsiones que tenían para el ejercicio 2016. El Ayuntamiento destaca una reducción del 32% en la piscina, unos 26.000 euros, y de un 27% en el polideportivo, unos 5.500 euros.
Además, desde el consistorio esperan ahorrar en este año 29.000 euros más que en 2016 ya que cuentan "con mayor número de lámparas LED".