Nada más levantarnos, al irnos a dormir o, incluso, en el baño: pasamos la vida pegados a una pantalla. En concreto, a cinco: la del móvil, el televisor, el ordenador, la tablet y las pantallas publicitarias.

Tanto que, según un estudio, pasamos 11 horas al día frente a una, lo que suponen 167 días al año de media.

Seis de cada diez españoles reconoce que ha sacado el móvil para mirar la hora y, en alguna ocasión, lo ha guardado sin haberla visto. El 19% de los encuestados reconoce, también, haber tenido algún percance mientras caminaba mirando el móvil. Un despiste más discreto (pero también común) es haberse pasado una parada de transporte público por ir más atentos al móvil que a nuestro destino.

El uso abusivo de ellas tiene consecuencias: nuestras relaciones personales se pueden ir deteriorando, y nuestra salud; sobre todo en los más pequeños: según los expertos en una década hasta el 90% de los niños podría tener miopía.