MERCEDES-BENZ CLASE C: ELEGANCIA Y ESPACIO PARA PRESUMIR
Sube de categoría con esta berlina alemana
Es una berlina premium que combina la clase pura con un tamaño perfecto para la buena vida. Te abre la puerta a un mundo de detalles refinados.

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El Mercedes-Benz Clase C es el coche que te hace sentir que lo has logrado, que has triunfado: Es una berlina prémium que combina la clase pura con un tamaño perfecto para la buena vida. En España, arranca en 50.573 € con el C 180 gasolina de 170 CV, un precio que te abre la puerta a un mundo de detalles refinados. Este cacharro se fabrica en Bremen, Alemania, y rueda por carreteras de Europa, América y Asia, y aquí lo encuentras fácil en los concesionarios Mercedes o dando un paseo por mercedes-benz.es. Con un largo de 4,75 metros, es el ideal para llevar a la familia o darte un capricho en solitario.
No es solo fachada: el interior te envuelve con una pantalla central de 11,9” que parece flotar, unos asientos que te dan ganas de quedarte a vivir en el coche y un maletero de 455 litros donde cabe desde el carrito del crío hasta las maletas para un finde largo. Si te estiras al C 300e o al Pinnacle (desde 60.000 €), te llevas cuero por todas partes y un techo panorámico que convierte cada viaje en un planazo. Es un coche que te dice “tú lo vales” sin gritarlo, y en España está al alcance con una financiación que baja la cuota a unos 600 €/mes.
Potencia suave y tecnología de alto nivel

El Clase C de 2025 viene con motores que mezclan nervio y cabeza, todos son microhíbridos con etiqueta ECO para que no te compliques en ciudad.El C 220d diésel de 200 CV es un cañón tranquilo: 4,6 l/100 km y un empujón que te planta en 100 km/h en 7,3 segundos. Si prefieres electricidad, el C 300e híbrido enchufable suma 313 CV y te da 100 km sin gasolina, perfecto para ir al trabajo y volver sin gastar un céntimo. El cambio automático de nueve marchas hace que todo fluya como un río apacible en verano.
Pero lo que te encantará es la tecnología: el sistema MBUX te escucha cuando le hablas, el Head-Up Display te pone los datos en el parabrisas como en una peli, y la suspensión ajustable (opcional) hace que las curvas sean un juego de niños. Es un coche que te lleva lejos, literal y figuradamente, con ese toque Mercedes que no falla nunca. Es tu coche.
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