Junto a las vacaciones y los días festivos, con el final del año se acerca uno de los momentos más emocionantes, que más ilusión genera y de los que más se habla durante días, semanas e incluso meses. Miles de españoles se impacientan ante la perspectiva de escuchar cómo los bombos de la Lotería Nacional comienzan a girar sobre el escenario del Teatro Real de Madrid, algo que ocurre sobre las 9:00 de la mañana del 22 de diciembre. Miles de españoles, ansiosos con las esperanzas puestas en ser uno de los afortunados que se lleven el premio Gordo de la Lotería de Navidad.

Y eso a pesar de que las probabilidades de llevarse este gran premio no son muy altas: una entre 100.000, que es la cantidad de números que entran en juego en este sorteo. Aunque muchos lo dejen todo en la superstición, la Lotería de Navidad es pura matemática: con un sólo décimo tienes exactamente las mismas posibilidades de llevarte el Gordo que de llevarte el segundo premio, o el tercero, menores en cuantía, por supuesto. Las probabilidades aumentan si hablamos de, al menos, recuperar el dinero invertido en participar en este premio: 15.304 números se llevan una recompensa económica, lo que supone algo más de un 15% de probabilidades de llevarse un premio.

No obstante, y aunque las probabilidades no lo sean todo, sí que lo es la ilusión. Hasta alcanzar puntos insospechados. "Ha venido gente que nos ha comprado décimos para sus hermanos, por ejemplo, pero nos ha pedido que se los demos nosotros porque no se hablaban entre ellos", aseguraba a laSexta Bosco Castillejo, responsable de la administración Doña Manolita. La Lotería de Navidad, capaz de salvar diferencias entre familiares enfadados.

En torno a la Lotería de Navidad existe más tradición que confianza en ganar algún premio, tanto que no es de extrañar que los españoles siempre compartamos Lotería de Navidad y que, además, siempre lo hagamos con las mismas personas. "Las tradiciones fomentan la identidad del grupo y nos proporcionan un sentimiento de pertenencia. Algo que como seres sociales tiene un valor adaptativo que nos ha permitido desarrollarnos y crecer en comunidad durante toda la vida", explica a laSexta.com Ana Luque, psicóloga sanitaria del centro de psicología Área Humana.

Sí, la tradición. ¿Pero qué dicen las matemáticas? Hay sorteos, muchos diríamos, que tienen una mayor probabilidad de premiar a los jugadores. El sorteo del Niño, que se celebra cada año el día de Reyes, reparte suerte entre más números. Esto se debe a que tiene una mayor cantidad de reintegros, aumentando la cifra de números premiados a 37.812, lo que implica que existe casi un 38% de probabilidades de llevarse al menos el dinero invertido en la participación. Los sorteos especiales de Cruz Roja o de la Asociación Española Contra el Cáncer, por ejemplo, también reparten premios a más de 37.000 números.

La Lotería que reparte mucho, pero poco a muchos

A lo largo del año se celebran sorteos extraordinarios en conmemoración de multitud de eventos. El pasado 10 de diciembre, por ejemplo, se celebró el sorteo de la Constitución, que ofrecía un 34% de probabilidades de recompensar a los jugadores con un premio. En esa cuña de probabilidad se mueven otros sorteos como el del Día de la Madre, el de San Valentín, o el de Vacaciones (36%).

Pero entonces, ¿por qué tiene más éxito la Lotería de Navidad? La razón radica en la cantidad de dinero que reparte entre las diferentes categorías, es decir, en el total deldinero que se reparte en premios. Este año puede llegar a repartir, teniendo en cuenta que se destina a premios el 70% de la emisión total, 2.520 millones de euros, 112 millones de euros más que en 2021.

Los otros premios, a pesar de tener en ocasiones recompensas millonarias, no se acercan a la cantidad de dinero que pueden llegar a repartir el juego navideño. El Niño, que es el que más cerca se queda, tiene un presupuesto para premios de 700 millones de euros, y el resto no suele llegar a los 150 millones de euros.