Una de las cosas que peor se lleva después de una noche de fiesta es la resaca. La resaca es un conjunto de síntomas que experimenta una persona después de tomar una gran cantidad de alcohol, y que van desde ligeros dolores de cabeza hasta la náusea, pasando por la deshidratación, sensibilidad a la luz o al sonido, ansiedad o irritabilidad.

Históricamente se ha hablado de muchos remedios caseros para superar la resaca, y lo cierto es que no existe magia: los expertos recomiendan una serie de consejos para sobrellevar la resaca lo más dignamente posible, que van desde el consumo de verduras amargas (sí, es mejor esto que una hamburguesa, aunque sea ésto lo que apetece) a la necesaria rehidratación. Ahora bien, en este contexto la farmacéutica sueca De Faire Medical ha desarrollado lo que considera que podría ser una solución para estos días.

La pastilla contra la resaca se llama Myrkl y salió a la venta únicamente en Reino Unido a principios del mes de julio. Lo cierto es que el 'stock' se agotó enseguida, y la farmacéutica está a la espera de recibir más de este producto para seguir distribuyéndola, no solo en Reino Unido, sino en otros países: también envía a Irlanda, Dinamarca, Alemania, Francia, Italia, Suecia, Austria, Finlandia y Suiza. Para que funcione, según la propia compañía, la primera pastilla debe tomarse unas 12 horas antes de beber y la segunda, antes de la primera ingesta de alcohol.

¿Cómo funciona en el cuerpo?

Desde la farmacéutica aseguran que tomar dos pastillas una hora antes de empezar a beber permite descomponer hasta un70% del alcohol durante un tiempo de 60 minutos. Una vez en el organismo, el fármaco continúa descomponiendo el alcohol hasta 12 horas después de la toma. Estas pastillas contienen una "formulación basada en la ciencia" de bacterias, L-cisteína (un aminoácido) y vitamina B12.

Según indican desde la farmacéutica , Myrkl lo que hace es activar las bacterias Bacillus subtilis y Bacillus coagulans, la L-cisteína y la vitamina B12 en el intestino, antes de que el alcohol llegue al hígado. Después trabajan juntas para descomponer el alcohol en agua y dióxido de carbono, con una producción mínima de acetaldehído o ácido acético. Ambas bacterias incluidas en Myrkl son probióticas, características por ser saludables para la digestión, según la propia compañía.

Sostienen, además, que esta pastilla es "100% vegana", por lo que "cualquier persona, independientemente de su condición alimentaria, la podría tomar". En un comunicado, el director ejecutivo de la farmacéutica, Håkan Magnusson, explicó que "el propósito de Myrkl es ayudar a los bebedores moderados regulares a despertar sintiéndose lo mejor posible al día siguiente". "Al ser la primera vez en la historia que se demuestra que un producto de consumo descompone el alcohol de forma eficaz y rápida, estamos muy emocionados de lanzar este producto innovador en Reino Unido y en la mayoría de los mercados europeos", señaló.

El estudio que lo avala

Para comprobar y demostrar la eficacia de Myrkl, el estudio fue publicado en la revista 'Nutrition and Metabolic Insights'. Los investigadores optaron por probar el fármaco con 24 personas adultas sanas y dividieron el grupo en dos. Doce de ellas tomaron dos cápsulas al día durante una semana, mientras que los demás recibieron un placebo. Los participantes de ambos grupos debían consumir entre 50 y 90 mililitros de alcohol, según su peso. Los científicos analizaron la sangre y el aliento cada 15 minutos durante la primera hora, y cada 60 minutos durante cinco horas más.

Los resultados mostraron que una hora después de ingerir la bebida (vodka), los participantes que tomaron las pastillas tenían un 70% menos de alcohol en el torrente sanguíneo en comparación con el grupo de control. De Faire Medical inventó las píldoras en 1990 y ha estado investigando más sobre ellas desde entonces, según aseguran en su página web.

Por el momento no hay muchas evidencias de que el tratamiento cumpla lo que promete. Entre algunos de los análisis de los expertos está el del doctor Mark Porter, columnista del británico 'The Times' y médico de profesión, que considera esta pastilla "una apuesta segura para convertirse en el producto más inútil de este año", porque si bien asegura que sí que contiene "bacterias que son eficaces para metabolizar el alcohol", existen "formas mejores" de evitar la resaca. En cualquier caso, esta pastilla contra la resaca no es nada barata: tiene un precio de 30 libras (unos 35 euros) la caja de 30 píldoras. Hasta el momento solo se puede comprar por Internet y, también por ahora, España no está entre los países a los que se realizan envíos.