La edad es un factor de riesgo para la aparición de enfermedades neurológicas tales como el alzhéimer, el párkinson o los ictus. Sin embargo y según los expertos en neurología existen algunos claves que están en nuestra mano para poder evitarlos: manteniendo un cerebro sano y hábitos saludables podemos prevenir el riesgo.

"A medida que cumplimos años, mayor es la posibilidad de que padezcamos algún tipo de enfermedad neurológica crónica, ya que la edad es uno de los factores de riesgo que se asocia a la aparición de estas enfermedades", afirma el Dr. Jesus Porta, vicepresidente de la Sociedad Española de Neurología (SEN).

Es cierto que la edad no es un factor de riesgo que se pueda modificar, pero sí lo son otros muchos factores de riesgo de estas enfermedades. Así y según expone este experto, "está comprobado que llevando hábitos de vida cerebro-saludables se podrían prevenir muchas enfermedades neurológicas".

Así -continúa el profesional- "estamos hablando de cifras como que hasta el 90% de los casos de ictuso más del 30% de los casos de Alzheimer y epilepsia se podrían llegar a evitar". Esto supondría reducir en más de 120.000 los nuevos casos que se producen cada año en España sólo de estas tres enfermedades, si la población comienza a tomar conciencia sobre la importancia que tiene cuidar el cerebro y más si lo hacemos desde que somos niños. Pero nunca es tarde para empezar.

Precisamente, para concienciar a la población sobre esta necesidad, la SEN pone en marcha un año más la Semana del Cerebro, una iniciativa que surgió hace ya más 10 años con este objetivo: cuidar nuestro cerebro para prevenir enfermedades neurológicas y vivir sin discapacidad. En esta página, podemos encontrar toda la información sobre las actividades de la campaña que da comienzo hoy -31 de octubre- y finalizará el próximo viernes, 4 de noviembre.

No podemos olvidar -recuerdan desde la SEN- que las enfermedades neurológicas son responsables del 23% de los años de vida perdidos por muerte prematura y son las causantes del 19% de las muertes que se producen cada año en España. Además, y según estimaciones de esta sociedad científica para este mismo años, "más de 120.000 personas en España están en riesgo de vivir con discapacidad o fallecer este año por no cuidar su salud cerebral".

7 claves para mantener un cerebro sano

Es importante mantener el cerebro activo, pues como informan desde la SEN, "una de las mayores claves a la hora de prevenir la aparición de enfermedades neurológicas es fomentar la reserva cognitiva, es decir, estimular el cerebro con actividades que ayuden a aumentar la conectividad entre neuronas".

Para ello debemos realizar actividades que nos permitan ejercitar nuestro cerebro con el objetivo de que funcione de una forma más eficaz. Por ejemplo, con cualquier actividad intelectual: leer, jugar, socializar, hacer crucigramas.

"Al igual que todos sabemos que es necesario dedicar tiempo a realizar ejercicio para mejorar nuestra salud corporal, todos deberíamos saber también que debemos dedicar tiempo a mejorar nuestra salud cerebral", asegura por su parte el Dr. José Miguel Láinez, presidente de la SEN.

Pero no podemos olvidarnos de los hábitos de vida saludable, pues el cerebro también se beneficia de ellos. "Otros factores que también están involucrados en la aparición de las enfermedades neurológicas -además de la actividad intelectual son: la inactividad física, el tabaquismo, la hipertensión, el consumo de alcohol, la depresión, la diabetes o la contaminación del aire".

Así, "evitando estos factores, siguiendo la dieta mediterránea, intentando tener un buen estado anímico y socializando, estaremos ayudando a reducir la prevalencia y progresión de muchas enfermedades neurológicas", afirma el doctor Porta.

En resumen, las 7 claves para mantener un cerebro sano y unos hábitos de vida saludable serían las siguientes:

  • Realizar actividades que estimulen la actividad cerebral y te mantengan mentalmente activo: leer, escribir, memorizar números de teléfono, jugar a juegos de mesa, hacer actividades manuales, crucigramas, aprender un idioma...
  • Realizar algún tipo de actividad física de forma regular, bien mediante la práctica de un deporte o caminando al menos unos 30 minutos al día.
  • Potenciar las relaciones sociales y afectivas evitando la incomunicación, el aislamiento social y el estrés.
  • Mantener una dieta saludable y equilibrada, evitando el exceso de grasas animales y de sal y potenciando el consumo de frutas y verduras.
  • Llevar hábitos de vida saludables sin consumo de alcohol, tabaco y drogas y dormir 8 horas diarias.
  • Controlar la hipertensión: es el principal factor de riesgo de enfermedades cerebrovasculares como el ictus.
  • Proteger el cerebro contra las agresiones físicas del exterior mediante la utilización del cinturón de seguridad y del casco (en la moto).