El crimen de Alcàsser fue el secuestro y asesinato de las conocidas como niñas de Alcàsser (Valencia), tres jóvenes de entre 14 y 15 años que desaparecieron en 1992 cuando iban a una discoteca de Picassent. Tras una ardua búsqueda, los cuerpos de Míriam, Toñi y Desirée fueron encontrados a finales de enero de 1993, 75 días después de su desaparición. La investigación señaló como autor material de los hechos a Antonio Anglés, el fugitivo más buscado de la historia criminal española.