El secuestro y asesinato de Miguel Ángel Blanco a manos de ETA fue un momento muy duro para todos los españoles. Especialmente para Borja Sémper, para quien supuso un antes y un después, como ha relatado en laSexta Noche: "Yo compartía con Miguel Ángel Ejecutiva. Éramos unos chavales en las Nuevas Generaciones del PP en el País Vasco. Fue un impacto terrorífico porque fue la primera vez en la que ETA fue narrando un asesinato".

Sémper ha hecho hincapié en esta cuestión, recordando que la banda terrorista "lo anunció y lo fue describiendo": "Secuestró al hijo de un electricista y nos dijo que en 48 horas lo iba a asesinar". En este sentido, el exdirigente popular ha señalado "la sociedad vasca y el conjunto de la sociedad española salió a la calle y no hubo ni el más mínimo gesto de compasión, de humanidad, por parte de ETA": "Sabíamos la crueldad de la que eran capaces, pero nunca nos lo habían anunciado de tal manera", ha añadido Sémper.

El exdirigente popular cree que todo aquello "hizo que la sociedad se movilizara por primera vez en Euskadi de forma masiva, mayoritaria": "Que se ocuparan espacios que hasta entonces estaban vetados, como la parte vieja de San Sebastián, que fuéramos a las sedes de Batasuna a exigir decencia, que los ertzaintzas, que se cubrían con 'verduguillos' la cabeza y la cara para no ser señalados, se los quitaran. Fue una explosión de la libertad y dignidad de la sociedad española y, singularmente, de la vasca".

"Hace bien en advertirnos"

El almirante Rodríguez Garat advierte: "El mundo vive un viaje peligroso y hay que ponerse el cinturón de seguridad"

Rodríguez Garat ha señalado que Josep Borrell ha hecho bien en lanzar una advertencia ya que el mundo vive "un viaje peligroso" en el que hay que ponerse "el cinturón de seguridad".