En tercero de carrera Adrián Oliva comenzó a sufrir ataques de ansiedad. Ahora, reflexiona sobre ello en Salvados, donde afirma a Gonzo que es más fácil hablar de salud mental en redes sociales que en el entorno. "Considero que nuestros padres tienen un estigma y el hecho de decir que yo me siento ansioso y deprimido no se puede llegar a tomar con la seriedad que debería tomarse por su parte", explica el joven, que se llegó a pagar un psicólogo privado para que sus padres no se enteraran.

Su miedo era que le dijeran que "estaba loco, que malgastaba el dinero y que el problema no era tan grave para costearse un profesional", explica Adrián Olivia, que confiesa que sus padres se están enterando a través de Salvados. Puedes ver su testimonio al completo en el vídeo principal de esta noticia.

Autolesiones, palizas en el colegio y un mal diagnóstico

"Empezaron manifestándose con dolores de estómago que no sabía de dónde venían, me daban dolores en las piernas y tenía pesadillas en las que me despertaba gritando y llorando", explica la joven en este vídeo, en el que afirma que desde los 8 a los 14 años le diagnosticaron hipocondriaca.