La Belle Époque se estrenó en 1992 e hizo historia. No solo por las historias que contaba, sino por cómo las contaba. Mientras que en otras películas lo normal es preguntarse si han envejecido bien, en el caso de esta cinta la pregunta es si la sociedad ha llegado a alcanzar ese nivel de respeto y tolerancia. "Hay unas cuantas cosas ahí que no se podrían hacer", comenta Jordi Évole y pone de ejemplo el 'blackface' de Penélope Cruz en la fiesta de carnavales en la que su personaje, Luz, se pinta la cara de negro.

"Esta película, no se puede decir que fuera políticamente correcta, era constantemente incorrecta", reconoce el director del filme Fernando Trueba. Otro ejemplo era que se trataba de una de las primeras veces que en el cine español salía una lesbiana, además lo hacía con total normalidad y tolerancia. "Una familia en la que todo se permite, todo se respeta", explica Ariadna Gil y añade "incluso de que una mujer se sienta un hombre". En el vídeo superior de la noticia puedes ver la conversación completa sobre por qué esta película es muy avanzada a su tiempo.

¿Hay un Harvey Weinstein español que nadie se atreve a denunciar?

"Gente muy importante me ha vetado hasta en diez películas por negarme a hacer portadas", destaca Maribel Verdú, que insiste en que "hay gente que abusa de su poder". Puedes ver su reflexión en este vídeo.