La 'excepción ibérica' ha entrado en vigor este martes y ya se ha producido la primera subasta con un límite al precio del gas de cuarenta euros. La medida, destinada a bajar el precio de la luz, ha provocado que caiga su coste en el mercado mayorista. Si hoy costaba 214 €/MWh, mañana será de 165 €/Mwh.

Pero, ¿eso significa que ha bajado la luz? Depende. Porque si bien es cierto que ha bajado en el mercado mayorista, el que directamente afecta a las tarifas reguladas de diez millones de hogares en nuestro país, también es cierto que al precio mayorista no se ha sumado la diferencia entre lo que les cuesta a las centrales gasísticas producir y la cantidad a la que se pone en el mercado.

Es decir, a esos 165 euros hay que sumar lo que se compensa a las eléctricas, que han pagado más de los cuarenta euros de tope. En total, 59 euros más: 224 euros €/Mwh. Eso son diez euros más de los 214 euros que costaba hoy la luz.

Hoy se ha producido una tormenta perfecta: ha subido mucho la demanda por la ola de calor y ha bajado también la producción de las centrales de energías renovables. Ha entrado poca energía eólica, poca hidráulica y más gas, lo que ha disparado el precio de esta compensación. El consumo de electricidad para aire acondicionado y refrigeradores se ha disparado. Las centrales de ciclo combinado de gas han irrumpido para cubrir toda esa demanda y han llegado a representar un 21% de toda la producción de electricidad. Muy por delante de las nucleares (18%), las eólicas (17%), la hidroeléctrica (14,5%) o la solar (12%), según los datos de Red Eléctrica.

Así, ¿mañana sube o baja? Algunos medios apuntan que solo reduce el recibo un 6%. Puede ser, porque hacen el cálculo en la factura y comparan con el gas sin topar hoy, que habría estado a 80 euros. Ayer se situó recordemos en 78. Esos 80 habrían disparado el precio de la luz hasta los 237. De ahí se arroja ese porcentaje.