Héroes de la verdad
Los que dicen basta: nombres y caras de quienes protestan contra la masacre en Gaza
¿Qué están diciendo? Políticos, militares y ciudadanos que, semana tras semana, se manifiestan desafiando el discurso oficial para denunciar la masacre en Gaza y exigir el cese inmediato de la violencia y el sufrimiento de la población civil.
En Israel, cada vez son más quienes se atreven a hablar claro sobre lo que ocurre en Gaza, a pesar de las consecuencias que eso implica. Desde militares retirados hasta líderes políticos, varios personajes han expresado duras críticas contra la gestión de la guerra, denunciando violaciones graves y el sufrimiento de la población civil. Sin embargo, sus palabras no han sido bien recibidas y han enfrentado fuertes sanciones.
El general retirado Yair Golán, considerado un héroe de guerra, fue apartado del ejército y se le prohibió el acceso a cualquier cuartel luego de afirmar que "un país sensato no mata bebés como pasatiempo". Sus declaraciones sobre la estrategia militar y las consecuencias del conflicto han provocado una respuesta oficial en su contra, acusándolo de fortalecer al enemigo.
De igual modo, el parlamentario Ayman Odeh fue expulsado del Knesset por acusar al primer ministro Benjamin Netanyahu de cometer crímenes de guerra en Gaza y de ser un "asesino en serie". Odeh mantiene su postura crítica a pesar de la censura y las represalias políticas.
El líder opositor Yair Lapid también ha sufrido ataques por advertir que Israel está en un "atolladero estratégico" y que el conflicto representa "un desastre económico y una tragedia política". Lapid ha solicitado públicamente que se detengan las hostilidades antes de que se pierdan más vidas, en especial la de los rehenes.
Estas voces críticas forman parte de un movimiento interno que protesta regularmente contra la gestión de la guerra. Miles de manifestantes se reúnen cada domingo en Jerusalén para condenar la masacre en Gaza y el bloqueo humanitario, denunciando la insuficiente entrada de ayuda como "una vergüenza".
Entre los exfuncionarios que se han pronunciado con dureza está el ex primer ministro Ehud Olmert, quien calificó las acciones en Gaza como "repugnantes e indignantes", cercanas a un crimen de guerra. A pesar de las críticas que recibe de medios afines al gobierno, Olmert mantiene su firme condena.
El descontento también se refleja en la opinión pública: encuestas recientes indican que el 61% de los israelíes quiere el fin inmediato de la guerra y la liberación de los rehenes. Además, medios como 'Haaretz' cuestionan la falta de pronunciamiento de los altos mandos militares, evidenciando un cambio significativo en la percepción del conflicto.
Familiares de los rehenes critican duramente al gobierno por su incapacidad para garantizar el retorno seguro de sus seres queridos.
Estas voces valientes desafían el discurso oficial y exigen el fin de la violencia en Gaza, enfrentando represalias en un contexto de creciente polarización y crisis humanitaria.