El Partido Popular se encuentra inmerso en un laberinto de contradicciones respecto al reconocimiento del estado palestino. Las declaraciones fluctúan entre el 'sí' y el 'no', dejando perplejos a muchos observadores políticos.

Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, ha pasado de cuestionar la pertinencia del debate sobre el Estado palestino a afirmar que no está en contra de su existencia, aunque critica la supuesta premiación a grupos terroristas.

Por su parte, el expresidente José María Aznar ha dado un giro radical en su postura, pasando de apoyar la idea de dos estados independientes en paz a poner en duda la existencia del Estado palestino.

Alberto Núñez Feijóo, máximo responsable del Partido Popular, ha oscilado entre el rechazo y el apoyo a la solución de los dos estados, mientras que otros miembros del partido han tratado de clarificar la posición oficial, sin lograr disipar la confusión.

Cuca Gamarra decía que "la posición del PP es que haya dos estados" y Miguel Tellado afirmaba que "la posición del Partido Popular es la oficial de España". Pero atendiendo a las diferentes posturas, se observa un vaivén de opiniones que refleja la complejidad del panorama político respecto a Oriente Medio.