Después de 118 días, la guerra en Ucrania sigue estancada. Pero sus consecuencias están muy presentes: La inflación, desbocada en toda Europa y en Estados Unidos por culpa, sobre todo, de la crisis energética. La situación ha llegado a tal punto que el carbón está volviendo. Alemania ha anunciado que va a reactivar las centrales térmicas que estaban paradas. Van a quemar más carbón, una decisión que ha tomado el Ministro de Economía y clima, Robert Habeck.

Curiosamente, el partido que lidera Habeck es el de Los Verdes. Pero vayamos a lo importante: ¿por qué vuelve Alemania al carbón y por qué apuestan los ecologistas por esta vía? Lo analiza en laSexta Clave Paco Rubio. Para acabar con la dependencia del gas ruso y no hundir su economía. Hace unos días, Gazprom decidió recortar el suministro un 40%, el precio del gas subió otro 40%, y encima tienen miedo de que Putin corte el grifo del todo. Ante esta coyuntura, la solución urgente para Alemania pasa por apostar por el carbón para suplir al gas ruso.

Lo cierto es que Alemania nunca se ha despedido del todo del carbón. Tenía el objetivo de despedirse de esta materia para siempre en 2030. Aprobó una ley para ello en octubre del año pasado. Pero la guerra ha cambiado los planes. Además, era un compromiso difícil y complejo para Alemania: en 2021 aún era el décimo mayor consumidor de carbón del planeta. El 28% de toda su energía procedía de este combustible fósil, la segunda más importante por detrás de las renovables. Ahora mismo está utilizando el 40% de su capacidad de producir energía a través del carbón y va a ir más.

Por otra parte, no han dejado de comprar gas. Están acumulando todo lo que pueden. Quieren llenar el granero para el invierno. Ahora mismo, las reservas de gas en Alemania están al 57%. El objetivo es llegar al 80% para el 1 de octubre y al 90% el 1 de noviembre. Así garantizan que los hogares alemanes estarán calientes para la llegada del frío. Pero este cambio radical de recursos no solo afecta a Alemania. En España también usamos carbón. En concreto, más del doble que hace un año. Eso sí, la aportación sigue siendo mínima: hace un año era un 1,6%; ahora, un 3,5%.

En este punto, nace una nueva pregunta. El sector está en proceso de desmantelamiento, pero ¿podemos hacer como Alemania? ¿Podemos reactivar el carbón como fuente de energía en España? Lo cierto es que en parte ya lo estamos haciendo. Aunque apenas se está hablando de ello, hemos reactivado en los últimos meses dos centrales que ya estaban encaminadas a su cierre. La de 'As Pontes' en A Coruña y la de 'Los Barrios' en Cádiz. Hay otras tres que están funcionando: 'Soto de Ribera' y 'Aboño' en Asturias y 'Alcudia' en Mallorca.

No obstante, el plan sigue siendo no apostar por el carbón. Se supone que es transitorio. Desde el Ministerio de Transición Ecológica aseguran a laSexta que la posibilidad de reactivar las que ya han sido desmanteladas es inviable y que el proceso de desmantelamiento va a seguir. Así que el consumo de carbón debería disminuir en los próximos meses porque las centrales de carbón tienen los días contados en España.