Poco después de ingresar en un psiquiátrico privado por problemas de sueño, Gloria Martínez desaparece en 1992 con solo 17 años, como recordó Equipo de Investigación en un programa de 2017 que laSexta volvió a emitir el pasado viernes.

La clínica de reposo donde desaparece la menor está en la Costa Blanca, es un edificio de 12.000 metros cuadrados rodeado de bosque y cercada por un muro de 2,5 metros de altura.

Los padres de la adolescente no comprenden lo ocurrido y piden ayuda hasta por televisión. "Espero que aparezca pronto y viva", afirmaba la madre. "Han declarado los responsables de la clínica que estaba atada de pies y manos con trozos de toallas", añadía el padre.

Antonio Martínez, abogado de los padres, conserva la documentación del caso, que recoge la declaración de la psiquiatra María Victoria Soler Lapuente, que ordena el ingreso de Gloria. "Dice que Gloria estaba tranquila al llegar a la clínica, que se despide de sus padres, pero tras marcharse estos empieza a delirar y, entonces, la doctora la inyecta medicación que no le hace efecto, le pone otra dosis y añade más medicación y ordena que se repita cada seis horas y que siga sujeta a la cama", recuerda el abogado.

Atan a Gloria y la medican, ¿qué le inyectan a una adolescente con problemas de sueño?

Doctor Sergio Oliveros, psiquiatra, lo analiza: "Hay dos tipos de neurolépticos que son fármacos para el tratamiento de las psicosis" y que "cuando se administran conjuntamente, lo que se llamaba un cóctel lítico, deja al paciente sedado, dormido y perfectamente manejable. Puede estar dormido de dos horas a diez".

Las enfermeras que atienden a Gloria Martínez aseguran que saltó por la ventana y desapareció. ¿Pudo después saltar la valla del recinto? La Policía registró la clínica y determinó que no había ni rastro de la menor, que había desaparecido.

María Victoria Soler Lapuente es la doctora que ordena el ingreso de Gloria. Equipo de Investigación la localiza, pero se niega a responder a las preguntas.

¿Gloria Martínez este muro medicada y casi en plena oscuridad? La Policía registra cada centímetro de la clínica y concluye que la adolescente no está ahí, que desaparece. "Yo ya dije todo lo que tuve que decir en el juzgado y no digo nada", contesta.

La Justicia condena a la doctora a pagar 104.000 euros a los padres. Culpa a su clínica de la pérdida de la menor y de trabajar sin licencia de hospital psiquiátrico. Pero el caso se cierra sin responsables penales.

*El contenido al que hace referencia la información forma parte de un programa de 2017 que Equipo de Investigación volvió a emitir el pasado viernes.