El reportero de Enviado Especial logra entrar en las plantas tanto de extracción como de transformación de litio para convertirlo en baterías para dispositivos electrónicos y sobre todo coches eléctricos.

El litio es clave para un sector estratégico y Bolivia protege con grandes medidas de seguridad sus centros de producción: se confirma que el litio es el oro del siglo XXI.

Tras conocer en Bolivia la mayor reserva de litio, Jalis de la Serna viaja a Alemania para conocer algunas de las aplicaciones de este importante metal. La ciudad de Friburgo es un ejemplo para el resto del país: desde 1990 han reducido en un 40% las emisiones de CO2.

También en Alemania, el reportero de Enviado Especial visita un vecindario que genera su propia energía y no depende de las grandes compañías eléctricas. Uno de los inquilinos asegura que la factura de la luz es más baja.

Otro ejemplo de vivienda sostenible es el famoso Heliotropo, un edificio que genera más energía de la que consume, energía que obtiene del sol gracias a un panel gigante que se mueve como un girasol para aprovechar al máximo la luz.

En todos estos casos las baterías de litio tienen gran importancia para almacenar la energía de más que producen, en Berlín existe también un campus que gracias -entre otras cosas- a las baterías de litio de sus autobuses y vehículos eléctricos ha logrado el objetivo de las cero emisiones propuesto par 2050.

Sin embargo Alemania tiene un escollo para lograr una transición energética al 100% y se trata de su dependencia de la energía del carbón que aún supone "el 35% de la energía total producida en todo el país".