Después de contar desde el terreno la realidad de la guerra en Gaza, Mikel Ayestaran visita el plató de El Intermedio, donde informa que "se acerca una nueva tregua en los próximos días". El motivo sería que la "presión está creciendo", tanto fuera con el posicionamiento de países como Alemania, Francia o Reino Unido por un alto el fuego, como dentro de Israel, donde las familias de los rehenes de Hamás exigen que se dé prioridad a su liberación.
Precisamente sobre estos rehenes, asegura que "es un factor clave" en la estrategia de guerra de Israel, hasta el punto de que la euforia por su rápido avance en Gaza "se ha bajado un poco de golpe" tras la noticia del asesinato de tres cautivos a manos del ejército israelí. "Ha generado tremendo malestar entre los israelíes, que han visto cómo esa estrategia de ir por la vía militar no solamente no está funcionando, sino que como dicen las familias, en lugar de traerlos con vida a casa los están trayendo en bolsas de plástico", apunta.
Sobre si es posible eliminar a Hamás de Gaza, Ayestaran recuerda que "los grandes líderes políticos no están allí" y que, según una reciente encuesta a palestinos en Gaza y Cisjordania, "se ha triplicado la popularidad de Hamás".
El corresponsal sostiene que el hecho de que no se vean imágenes de las matanzas en Gaza en los medios israelíes "tiene un efecto psicológico directo" y denuncia que no se permita entrar en la zona a los periodistas internacionales. "Nosotros no podemos pasar y a los colegas que están dentro los están matando", comenta Ayestaran, que asegura indignado que es "algo que no había visto en ninguna otra guerra, y no pasa nada".
Acerca de cuándo acabará la guerra, explica que Israel "está buscando una imagen de victoria, la cabeza de uno de los líderes de Hamás y hasta que no la encuentren no van a parar".
Tirar del hilo
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