Desde hace unos días el cielo de Nueva Yorkamanece con una niebla naranja, que no es otro que el humo procedente de los más de 400 incendios que ya han asolado "4.000.000 de hectáreas en Canadá", informa Guillermo Fesser desde Estados Unidos. "Aconsejan no salir. De hecho, hoy no se ha ido a la oficina, los colegios se han suspendido y se ha recomendado salir con mascarillas".

Todo esto debido a "los gases tóxicos y a las partículas de ceniza" que conforman este humo y que son perjudiciales para la salud humana: "Tenemos un código morado, que es el de riesgo inminente para la salud", explica Fesser.

Esto ha hecho que Nueva York batiera este miércoles el "récord por ser la ciudad más contaminada del planeta", aunque "lo peor está en el norte": "A la gente le lloran los ojos, sufren crisis de ansiedad y tienen toses que no se quitan".