Este simpático (o quizá, no tanto) loro persigue por toda la casa al perro, que no deja de intentar jugar con él. Pero el ave no cede y sigue dando pasos decididos en su dirección mientras va gritando "¡perro, hijo de...!", tal y como podemos ver en este vídeo viral emitido en Aruser@s.

"El problema es que eso, normalmente, lo aprenden por repetición. Alguien ha pasado un ratito enseñándole al loro", observa Alfonso Arús mientras Rocío Cano no puede evitar la carcajada.

"Este perro debe de ser un trasto y el dueño lo debe de haber dicho una cantidad de veces para que el loro lo repita... además todo junto. Perro y el adjetivo", dice divertida Alba Sánchez.