Stephanie Doody es una enamorada de los gatos. Esta mujer de Inglaterra tiene tres en su casa que le acompañan a todas partes. Tanto es así que, siempre que se quedaba quieta, los tres animales se sentaban encima de su estómago, algo que la acabó haciendo sospechar.
Después de seis meses, la mujer empezó a perder peso, por lo que decidió acudir al médico. Allí, le diagnosticaron cáncer de ovarios y cáncer de intestino. Después de varias operaciones, Stephanie se encuentra recuperándose en casa junto a sus animales.
Rennie, Dinky y Jaddy son los tres gatos que, gracias a su instinto, pudieron alertar a su dueña de que algo raro estaba pasando con su salud, y, aunque en la mayoría de los casos este tipo de cáncer se detecta demasiado tarde, esta vez pudo detectarse a tiempo.