España, en llamas
El turismo rural, una víctima más del fuego: "Nadie quiere la inseguridad que provocan los incendios"
Los detalles Con campos de cultivo convertidos en ceniza y bosques arrasados, quienes viven del turismo rural luchan contra las llamas y el estigma del fuego. "La gente se queda con esa imagen", afirman.

Resumen IA supervisado
España enfrenta una devastadora ola de incendios que ha arrasado bosques, campos de cultivo y ha afectado gravemente al turismo rural. En Castilla y León, diez espacios naturales protegidos, incluyendo Las Médulas y la Sierra de Gredos, han sido consumidos por el fuego. Luis Chico, presidente de la Asociación de Turismo Rural de Castilla y León, señala que las cancelaciones son casi totales debido a la inseguridad. Además, especies animales como el oso pardo y el lobo ibérico han perdido su hábitat. Aunque algunas áreas permanecen intactas, la recuperación de los bosques llevará décadas, advierte Jorge Aguado de WWF. A pesar de la destrucción, queda esperanza en la reconstrucción y en la resiliencia de la naturaleza.
* Resumen supervisado por periodistas.
España arde en llamas. Víctima del fuego, de unos incendios como nunca antes se habían visto. Bosques arrasados, campos de cultivo convertidos en ceniza y un turismo rural que, de nuevo, se resiente. Que quienes viven de él van a sentir después de un verano en el que buena parte de la riqueza del país se ha quemado.
En un país en el que hasta 10 espacios naturales protegidos de Castilla y León han ardido. Parajes como Las Médulas o la Sierra de Gredos han sido pasto de las llamas, haciendo del turismo rural una víctima más del fuego.
"Ha habido bastantes cancelaciones. Casi totales. La inseguridad que provoca el fuego no la quiere nadie para sí ni para su familia", ha afirmado Luis Chico, presidente de la Asociación de Turismo Rural de Castilla y León.
Porque no solo es el fuego. No solo son las cenizas. Es, además, ese estigma que deja un gran incendio. "Venimos de uno muy grande en 2022. Desde ese momento, la gente se quedó con esa imagen", afirma Marcos Reinoso, presidente de la Asociación Serra do Courel.
Entre todo, aparece una importante figura. Es la del turista solidario, la de alguien que "se ha quedado incluso para ayudar a las tareas de extinción", como cuenta Sandra González, Secretaria de la Asociación Montaña Palentina Turismo Vivo.
Varias especies se han quedado sin su hábitat
Y es que toda ayuda era y es poca. Las llamas, en zonas de montaña, amenazan a especies animales como el oso pardo, como el lobo ibérico e incluso los ciervos. Todos ellos han visto desaparecer su hábitat. Y en el aire, lo mismo puede decirse de aves protegidas como el águila imperial o el buitre negro.
Entre todo, aparece ese espacio de esperanza. "Hay zonas con un valor incalculable que han ardido, pero otras están intactas. Aquí sigue quedando vida", afirma Sandra González.
Ahora, a pensar en la reconstrucción, como dicen desde Turismo Rural Fuentes del Narcea: "Que la naturaleza resurja pronto y que no se vea esto como lo que fue, como pasto de las llamas".
"Décadas" para recuperar un bosque maduro
Eso sí, ahora se requiere tiempo, mucho tiempo. "Si un bosque maduro se ha quemado no se va a tardar 10 o 15 años en recuperarlo. Se va a tardar décadas", avisa Jorge Aguado, ingeniero forestal de WWF, quien alerta de que hay "camadas muy jóvenes" de especies animales que "probablemente no hayan escapado de las llamas".