La Inspección de Trabajo
de la Generalitat ha dado la razón al sindicato CCOO que denunció a Burger King por la obligación de que los dependientes llevaran corbata y las dependientas
lazo, han informado fuentes del departamento.
El sindicato interpuso
la denuncia contra la cadena de restauración por "no respetar el derecho a
la imagen y dignidad" de sus trabajadores, ha informado el sindicato este
martes en un comunicado.
El sindicato había
pedido en distintas ocasiones a la empresa que rectificase la normativa interna
porque "atentaba contra la dignidad de sus trabajadores", por la
normativa de vestimenta impuesta, a lo que la empresa no cedió por considerarla
una normativa "intocable".
Debido a la negativa de
la empresa, CCOO optó por interponer una denuncia respecto a la violación al
derecho a la propia imagen de los trabajadores, que están obligados, en el caso
de los hombres, a llevar las barbas y bigotes rasurados.
Además, el código de
vestimenta marca que las mujeres deben llevar un lazo mientras que los hombres
una corbata, algo que el sindicato califica como contrario al principio de no
discriminación por razón de sexo, sin una "justificación objetiva".
CCOO ha pedido a la
empresa cambiar la normativa por medidas más moderadas como el uso de barbera
para asegurar la higiene alimenticia pero sin ir en contra de derechos
fundamentales, y ha hecho un llamamiento a extrapolar esta denuncia a otras
empresas, sobre todo del sector de la hostelería, en las que se viven este tipo
de situaciones discriminatorias.