Los intentos de suicidio y las autolesiones han crecido un 250% entre la población infantojuvenil en el último año. Es la epidemia silenciosa: va de la mano de la pandemia de coronavirus y ataca especialmente a los jóvenes. De hecho, es la primera vez que la principal causa de muerte no natural de los jóvenes de 19 a 25 años es el suicidio.

En España hay diez muertes al día por suicidio, el doble que accidentes de tráfico. Entre los motivos de su aumento se encuentran la falta de redes de apoyo o la falta visibilidad.

Es precisamente ese estigma social con lo que Alicia Arévalo, hermana de una joven que se suicidó a los 19 años, ha querido romper: "Yo no digo 'mi hermana ha muerto', no. Yo digo 'mi hermana se ha suicidado'", ha expresado.

Román Reyes pasó por lo mismo al perder a su madre. Tras su suicidio decidió crear la plataforma 'Stop-suicidios' para crear conciencia y prevenirlos: "Es un dolor tan profundo y hay tanta rabia dentro de ver que te han dejado solo, que la han dejado morir y ver que la vida de tu madre no vale nada".

Su lucha para reducir la cifra de suicidios comenzó hace dos años. Ahora, el joven ya suma más de 300.000 firmas para reclamar medidas a Sanidad para evitarlos. "Hay que hablar de ello. Cada vez hay más hilos virales de casos cercanos y es que son 10 al día, es una necesidad que tenemos la sociedad y que no están cubriendo los políticos", ha espetado.

El próximo sábado, su voz se unirá a la de tantos otros en una manifestación que recorrerá el centro de Madrid. Y es que, como recuerda Román, actuar ya es "cuestión de vida o muerte": "Hay personas que están buscando ayuda y que no la tienen porque no hay ni siquiera un teléfono de atención corto, no hay psicólogos en la sanidad pública, es un lujo, te lo tienes que pagar... es cuestión de vida o muerte".

La idea de la marcha reivindicativa surgió aquí en 'La Barandilla', la misma que hace tres años creó el Teléfono Contra el Suicidio, totalmente gratuito (911 385 385).

Su petición es, tal y como ha explicado José Manuel Dolader, director de la Asociación, que se cree de forma urgente una Ley nacional de prevención del suicidio. "Que los políticos no sean cobardes y que no busquen proyectos a corto plazo, sino que sepan que prevención del suicidio es cuestión de años. Cuanto antes empiecen, antes empezaremos a salvar vidas", ha explicado. Y es que el abandono de las instituciones puede ser clave en salvar vidas. De hecho, según asegura Román, su madre, con medios, hubiera sobrevivido.