El Ministerio de Sanidad ha aprobado finalmente el Plan Integral de Prevención del Tabaquismo (PIT) 2024-2027 con el aval de todas las comunidades, también las del PP, "muy satisfechas" por este día tan "importante" para la lucha contra el tabaco.

"Desde hoy, este plan es una realidad y este logro es un motivo de orgullo nacional", ha declarado la ministra de Sanidad, Mónica García, al término del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, que ha culminado así con un clima muy distinto al que comenzó esta mañana.

En este sentido, la ministra ha señalado que el plan antitabaco "emana del trabajo de todas las comunidades", que finalmente han respaldado el texto, y ha apuntado que "ahora toca" materializar en una serie de iniciativas legislativas, entre ellas las que regularán los nuevos espacios sin humo o el empaquetado genérico.

En esta percepción ha coincidido el consejero gallego de Sanidad, Julio García Comesaña (PP), quien ha celebrado que se recogieran la mayoría de propuestas autonómicas, entre ellas que el aumento de la fiscalidad del tabaco redunde en medidas de prevención, y que se haya abierto la puerta a que la autorregulación de los espacios sin humo pueda debatirse en el desarrollo legislativo que ahora debe iniciar. "Es un día importante para la lucha contra el tabaco y las comunidades del PP estamos satisfechas con que el plan recoja todo lo que recoge", ha subrayado.

La ministra de Sanidad, Mónica García, ha hecho público este viernes el Plan Antitabaco en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud. García ha expresado que presenta este plan "con orgullo y sin miedo" y dando un paso adelante de "la lucha de la primera causa de muerte en este país". Un plan que, ha insistido, lleva 14 años sin actualizarse y que supone una hoja de ruta que guiará un futuro paquete legislativo y con el que España vuelve a situarse "en la vanguardia" en la lucha contra el tabaquismo, primera causa de mortalidad evitable en nuestro país que está detrás de 16 tipos de cáncer.

"Hoy es un gran día para la salud pública, hoy es un gran día para la salud individual y colectiva y hoy es un gran día para la calidad de vida", ha aplaudido la titular de Sanidad antes de resaltar, una vez más, que el Ministerio va a sacar adelante el plan "con orgullo y con coherencia".

Este jueves, cuando vencía el plazo para votar su adhesión total o parcial al plan, solo Cataluña, Canarias, País Vasco, Navarra y Asturias trasladaron a la Dirección General de Salud Pública del Ministerio su postura, informaron a EFE fuentes de este departamento y de las distintas consejerías. El resto optó por no emitir su voto para formalizar su adhesión por rechazar el procedimiento utilizado por Sanidad para sacar adelante el plan mediante un acuerdo de cooperación, que implica que las autonomías se pueden sumar total o parcialmente a sus puntos, en cuyo caso tienen que especificar con cuáles discrepan.

Las claves del borrador

En el borrador del Plan Antitabaco, el Ministerio de Sanidad define cinco metas y 23 objetivos. La primera meta es prevenir el consumo de tabaco y los productos relacionados con él, el Ministerio también se propone fomentar el abandono del tabaquismo y la ayuda para dejar de fumar. Como tercera meta, Sanidad busca reducir la exposición ambiental a las emisiones de tabaco. Por último, promover la investigación y potenciar las alianzas.

Dentro de la estrategia legislativa para cumplir la primera meta, Sanidad incluye en el borrador del Plan Antitabaco la prohibición de aditivos que confieren aromas en el tabaco y en los productos relacionados, acorde a lo que se pacte en el marco de la Unión Europea.

Además, planea nuevas medidas fiscales incrementando los impuestos a los productos de este sector, incrementando sus precios. En esta línea, apunta a la creación de una nueva figura impositiva que establezca un gravamen específico para los cigarrillos electrónicos con nicotina.

Destaca también dentro de la intención del Ministerio de fomentar el abandono del tabaquismo la estrategia planteada por Sanidad para ampliar los espacios sin humo de tabaco y sin aerosoles de cigarrillos electrónicos y productos relacionados en determinados espacios de uso público o colectivo, especialmente aquellos con presencia de personas menores de edad; así como la prohibición de los dispositivos de un solo uso relacionados con el tabaco.