Drama en el Corredor del Henares

"Lo que nos han dado es una mierda": los afectados por el Metro de San Fernando exigen a Ayuso "soluciones concretas y reales"

El contexto
73 viviendas han sido derribadas y hay más de 600 con grietas y en riesgo de derrumbe en todo el Corredor del Henares por el hundimiento de la línea 7B del Metro de Madrid.

Uno de los chalecos de la Plataforma de Afectados por la línea de Metro 7B de San Fernando de Henares

Los vecinos de San Fernando de Henares vuelven a las calles para exigir "soluciones concretas y reales" para los afectados por el derrumbe de decenas de viviendas debido al hundimiento del terreno por las obras de la línea 7B del Metro de Madrid, efectuadas durante la presidencia de Esperanza Aguirre. En total, 73 viviendas han sido derribadas y hay más de 600 con grietas y en riesgo de derrumbe, lo que ha obligado a centenares de familias a abandonar sus hogares.

Este sábado, centenares de personas protestaron marchando desde San Fernando hasta la estación de Coslada Central y han exigido soluciones inmediatas al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso.

"El Gobierno madrileño sigue sin apostar por soluciones reales, aplicando una política de parches que ya ha costado más de 200 millones de euros a todos los contribuyentes y que, lejos de resolver el problema, lo ha extendido de forma exponencial desde que se iniciaron los trabajos en septiembre del año 2022", ha denunciado la Plataforma de Afectados por la línea 7B de Metro.

Además, los manifestantes reclaman "soluciones concretas y reales" para los afectados y denuncian "la alarmante situación de la Línea 7B de Metro a su paso por Coslada", con el servicio cortado desde julio de 2024.

Esta situación, que originalmente estaba acotada a San Fernando, se está extendiendo por todo el Corredor del Henares, por lo que el Ayuntamiento de Coslada también exige soluciones. Sonia Murillo, concejala de Transición Ecológica, reclama "un plan integral para esta problemática" al Gobierno de Ayuso.

Un problema que, aseguran los vecinos, está afectando tanto a su salud física como mental, ya que la incertidumbre se ha apoderado de sus vidas, porque nadie les garantiza que el futuro de sus viviendas está garantizado. "Somos tres personas en casa y sinceramente, lo pasamos fatal, porque no sabemos qué va a pasar mañana", denuncia Julián, un vecino afectado.

Por ello, reclama que, en vez de gastar el dinero en inyectar hormigón en el suburbano, la Comunidad de Madrid priorice a los habitantes de San Fernando y Coslada: "Lo único que hacen es gastar dinero en cemento, y a los afectados, a los que les han tirado la casa, no les han dado una mierda y no se pueden comprar una vivienda". Por ello, reclaman a Ayuso que ponga a los vecinos por delante del Metro.