La Policía Nacional ha hecho público el informe en el que detalla los pasos que siguieron desde que recibieron la denuncia de la desaparición del joven, el pasado 12 de octubre. Un informe que revela datos importantes del caso.

Y es que gracias a ese documento se ha podido conocer que la Policía tenía desde el domingo por la tarde, 15 de octubre, unas imágenes que les cedió un local cercano en las que se vía Álvaro. En ellas, el joven aparecía subido en el techo de un tren y "caía fulminado" inmediatamente. El joven murió electrocutado en ese momento, según ha confirmado la autopsia, al tocar la catenaria.

Sin embargo, el cuerpo sin vida de Álvaro no se encontró hasta el lunes por la mañana. El cadáver fue localizado entre dos vagones de un tren que llevaba parado en el área de mantenimiento de la estación de Santa Justa desde el 24 de agosto y que se movió este lunes para propiciar la entrada de otro convoy.

El hallazgo se produjo en una zona que ya había sido rastreada por los cuerpos de seguridad que buscaban al joven y que iba a ser de nuevo batida este lunes. El informe policial incide en que el cuerpo había quedado "completamente oculto" entre dos vagones y no fue visible hasta que el tren se movió.