Las últimas conversaciones entre Diana Quer y su madre desveladas por Interviú ponen de manifiesto los problemas que estaba afrontando la familia, y confirma uno de los datos que se tienen en cuenta en la investigación, y es que en la casa de Diana había orfidales y era probable que la joven los consumiera.
En las conversaciones, Diana le dice a su madre que tiene claro que no va a ir a vivir con su padre porque prefiere vivir con ella, independientemente de lo que haga su hermana Valeria. Este mensaje se produce en un momento de nerviosismo de la joven, en el que confiesa que su padre le está "haciendo el castigo de dejar de hablarla".
Su madre aconseja a Diana tomarse "un orfi" para tranquilizarse, tras lo que la joven explica que en el desayuno incluso llegó a provocarse el vómito por los nervios que lleva encima. Además, pide a su madre que no hable con su hermana ni haga nada.
"Le habían lavado el cerebro"
De California a Manresa para rescatar a su hermana de una secta: "El cura me agarró y me tiró al suelo"
El contexto Adriana di Gerónimo se enteró de que su hermana estaba recluida en una congregación católica que había recibido denuncias por abusos sexuales. Al recibir la noticia, no dudó en dirigirse a Manresa para ayudarla.