Un niño de tres años ha fallecido la madrugada del martes en Gijón tras atragantarse con una de las tradicionales uvas de Nochevieja en su domicilio, ubicado en el barrio del Natahoyo, según han informado fuentes municipales.

"Fue sonar la última campanada y el tomarse la última uva y se atragantó", dice Viviana Bustos, la madre del niño fallecido, entre lágrimas.

Después de que el pequeño se atragantara con la uva, los padres avisaron a la Policía Local que se desplazó a la vivienda, en la calle Independencia, y evacuó al menor al hospital de Jove, según las mismas fuentes.

"Era un niño muy alegre, que le gustaban mucho las fiestas, y estaba comiéndose sus uvas. Le metimos los dedos, le tocamos en el pecho y llamamos a la UVI, pero no apareció", declara Bustos.

El niño llegó al centro sanitario sin respiración ni pulso por lo que los intentos de reanimación que se le realizaron resultaron infructuosos.