Un barco con 2.500 kilos de cocaína a bordo ha sido interceptado por agentes de la Policía Nacional, en una operación en la que se ha detenido a siete personas con colaboración de fuerzas de seguridad de España, Estados Unidos, Reino Unido y Portugal.

La nave, de bandera venezolana, fue abordada en el mar en cooperación con personal de la Agencia Tributaria y está siendo conducido a Las Palmas de Gran Canaria, donde será mostrado a los medios a su llegada a puerto.

Las autoridades no pueden precisar por ahora si el destino de la droga era España o algún otro país europeo ni a qué distancia de la isla fue interceptado.