Greenpeace pide a los líderes políticos planes reales para acelerar la reducción de gases de efecto invernadero y considera que la intervención del presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ante la ONU en la Cumbre Climática que se celebrará en Nueva York (Estados Unidos) el 23 de septiembre debería apostar por políticas climáticas más ambiciosas que las actuales en España.

La ONG celebra que la juventud, movilizada por la emergencia climática, inunda las calles de todo el mundo para exigir una acción urgente. La cumbre climática tendrá lugar este lunes, días después de movilizaciones juveniles en todo el mundo y en el marco de una semana entera de movilizaciones que terminará el próximo 27 de septiembre con una manifestación mundial.

El objetivo de la Cumbre, convocada por el secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, es fortalecer los compromisos nacionales en materia de clima y garantizar que los líderes presenten planes de acción tangibles, en lugar de discursos.

La directora ejecutiva de Greenpeace Internacional, Jennifer Morgan, cree que esta es "la hora de la verdad", ya que la cumbre se ha convocado con la intención "específica" de ofrecer una plataforma a los países para que demuestren un "verdadero liderazgo climático".

Así, considera que los países que están a la altura del desafío son aquellos cuyos líderes tienen que presentar planes concretos y ambiciosos sobre cómo reducir las emisiones y poner fin a las subvenciones al carbón y a los combustibles fósiles. "Si fracasan, tendrán que responder ante los miles de jóvenes en las calles", ha advertido.

Mientras, Guterres ha pedido a los países que asisten a la Cumbre de Acción Climática que sus propuestas sean "claras, viables y compatibles con la ciencia más reciente".

Por parte de España, el lunes por la tarde intervendrá Pedro Sánchez, en el bloque que tratará sobre la acción centrada en la gente. En este sentido, Greenpeace destaca que la acción climática es una oportunidad para construir una sociedad más justa y democrática y que España tiene el "potencial necesario" para convertirse en el "referente en energías renovables que el mundo necesita".

La responsable de la campaña de Cambio Climático de Greenpeace, Tatiana Nuño, insiste calificar como una "oportunidad para el empleo, para la salud y para el clima" la transición energética hacia un modelo 100% renovable, pero añade que para asegurara que se toman las medidas necesarias para no superar los 1,5ºC se debe aumentar la ambición para reducir las emisiones al menos un 55% en 2030 respecto a 1990.

"Necesitamos a toda la clase política, sea del color que sea, para liderar la lucha contra el cambio climático y para la formación de un gobierno estable que ponga en el centro a las personas y el planeta", ha apostillado.

La ONG recuerda al Gobierno su postura para que Europa aumentase los objetivos de reducción de emisiones para 2030; sin embargo, esta posición progresista en el ámbito internacional contrasta con la mucho más conservadora que mantiene el Gobierno en el plano nacional, donde solo propone la reducción del 20 por ciento respecto a 1990, que es lo reflejado en el borrador del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima.