La Fiscalía ha retirado el recurso de apelación que formalizó ante la Audiencia de Granada al auto del Juzgado de guardia que decretó la libertad provisional de Juana Rivas, la vecina de Maracena que entregó ante la Guardia Civil a sus hijos, al entender que ha cesado la situación delictiva.
Fuentes del Ministerio Público han informado de la decisión de la Fiscalía, tomada tras analizar la nueva situación de la causa que representa que esta vecina de Maracena entregara a sus dos hijos menores, de 11 y 3 años.
Después de que Rivas acatase así la sentencia que la obligaba a restablecer a los niños con el padre, Francesco Arcuri, con residencia en Italia, la Fiscalía ha decidido retirar el recurso para pedir su entrada en prisión.
La Fiscalía deja así sin efecto el recurso de apelación al tribunal provincial que presentó para oponerse al auto que dictó el pasado el Juzgado en funciones de guardia y en el que dejó a Juana Rivas en libertad con cargos tras ser detenida esa misma mañana por la Policía Nacional en las inmediaciones del juzgado.
Las mismas fuentes han explicado que la decisión responde a la entrega de los menores, que se reencontraron con su progenitor, lo que provoca el "cese de la situación delictiva" y hace innecesario pedir que esta vecina de Maracena entre en la cárcel.
La Fiscalía ha formalizado el escrito para desistir del recurso de apelación y se suma así el criterio del titular del Juzgado en funciones de guardia, que decretó la libertad provisional de Juana Rivas, investigada por los posibles delitos de desobediencia y sustracción de menores, al considerar que no hay riesgo de fuga.
Contra el auto que dejó a esta madre en libertad, la representación legal de Francesco Arcuri formalizó el otro recurso de apelación ante la Audiencia de Granada, que cuenta con un plazo de un mes para pronunciarse, lo que podría hacer celebrando una "vistilla" con los dos progenitores o sin este paso.
Por otra parte, las profesionales de los centros municipales de información de la mujer de la provincia de Granada han enviado un comunicado a los medios para "poner en valor" su trabajo y manifestar que continuarán su labor en pro de los derechos de las mujeres y de sus hijos.
"Apoyamos el trabajo de nuestras compañeras de Maracena, sintiendo que el ataque que están sufriendo es directo a todas las profesionales que diariamente atendemos a mujeres y sus hijas e hijos en la provincia de Granada", indica el comunicado.