El barco de rescate 'Ocean Viking' ha salvado esta madrugada 62 personas, entre ellas diez niños y un bebé, a la deriva en un bote de madera "sobrecargado y bajo condiciones extremas" en la zona de búsqueda y rescate de Malta tras ocho horas de búsqueda, según ha informado Médicos sin Fronteras, operadora del barco junto a la ONG SOS Méditerranée. Todos los rescatados se encuentran ya a bordo del barco, donde están recibiendo atención médica.

Este viernes también rescataron a 112 personas que se encontraban en un bote neumático desinflado a 34 millas náuticas de la costa de Libia. Entre ellos había 24 mujeres, tres de ellas embarazadas y 38 niños, el más pequeño de tres meses, informaron las organizaciones en sus cuentas en Twitter.

En estos momentos, solo el 'Ocean Viking' se encuentra en el Mediterráneo central, mientras se espera la llegada en las próximas horas a la zona del barco de la ONG española 'Open Arms' y del 'Alan Kurdi', de la ONG alemana Sea Eye. Mientras que el 'Sea Watch 3' de la ONG homónima, tras más de cinco meses bloqueado en el puerto italiano de Licata (sur), ganó este jueves un recurso judicial para volver al mar, pero aún necesitará algunas semanas para regresar a las operaciones.

El último desembarco en Italia fue el pasado 4 de diciembre cuando se autorizó la llegada de los 121 migrantes que permanecieron durante seis días a bordo del 'Alan Kurdi' y el 'Ocean Viking'.

Su desembarco en puertos de Sicilia (isla de Italia) se produjo después de que la Comisión Europea activase el protocolo para la reubicación de los migrantes y algunos países europeos, como Alemania y Francia, se ofrecieran a recibir a algunas de estas personas, informaron las autoridades italianas en su momento.

Según el informe 'Missing Migrants' (Inmigrantes desaparecidos) de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), en el Mediterráneo central han muerto en 2019 1.246 migrantes en su intento de llegar a Europa.