El ranking no solo muestra el lugar del globo en el que se puede beber uno de los tragos de cerveza más baratos, sino que también ha localizado el rincón del mundo donde podría estar el sorbo de cebada más costoso.

El resultado es tajante: los países del este de Europa son los más generosos con los precios. En Belgrado, Serbia, se podrá conseguir una pinta por tres euros. Aún más barata es en Kiev, donde por 2,10 euros se podrá beber hasta medio litro.

Málaga también se encuentra en el 'top 5', encontrando una cerveza de esta unidad de medida por el sorprendente precio de 2,5 euros; pero a la cabeza se encuentra Bratislava: la capital de Eslovaquia la ofrece por 1,99 euros. Y ojo, todo ello teniendo en cuenta que se trata de grandes ciudades, por lo que quizás en algún pueblo circundante encontremos la pinta más barata del mundo.

Si queremos encontrar precios iguales, hay que salirse de Europa. En México se encuentra por 2,72 euros, tan solo cuesta 2,31 en la ciudad asiática de Ho Chi Minh, y 2,63 en Asunción.

Hong Kong y Ginebra estallan el ranking. En ambas, tomarse una pinta conlleva desembolsar más de 9,5 euros. Le siguen capitales europeas como Helsinki, París o Londres. Al otro lado del Atlántico, Nueva York recoge los datos más impresionantes: 8,04 euros por una pinta.