Ángel, el detenido por el atropello de un niño de seis años el pasado domingo en Valencia, reconoce que el coche con el que se produjo el arrollamiento y que posteriormente se dio a la fuga es suyo, pero niega que fuera él quien conducía. Las huellas encontradas en el coche, sin embargo, demuestran lo contrario.

Así lo ha trasladado su abogado a laSexta este viernes, precisando que el joven de 22 años, que fue detenido tras entregarse el jueves a la Policía, se personó en comisaría porque sabía que estaba requerido y que, aunque el vehículo, en efecto, está a su nombre, no reconoce que él condujera.

No obstante, los agentes encargados de la investigación realizaron una inspección ocultar del coche y, según fuentes policiales, hay huellas de Ángel.

El arresto se produjo después de que la Policía identificara el lunes la matrícula del vehículo, un BMW serie 3 de color gris que localizaron el miércoles aparcado en un garaje de una localidad de la comarca de La Costera, donde el arrestado tiene uno de sus domicilios.

El propietario es un hombre de 22 años y origen español que tiene antecedentes policiales, según confirmaba este jueves la Policía Nacional. Aunque tiene domicilio en Valencia, habitualmente se mueve por Xàtiva y fue precisamente en los accesos a esta última localidad donde le habría captado una cámara.

Atropello y fuga

El arrollamiento se produjo el domingo 19 de mayo en un paso de peatones de la avenida Hermanos Machado de Valencia, en el cruce con Camino de Moncada, después de que el conductor se saltara un semáforo en rojo, atropellando a un niño de seis años.

El pequeño sufrió heridas de gravedad: traumatismo craneoencefálico, traumatismo torácico, contusión pélvica y fractura del fémur de ambas piernas y tuvo que ser trasladado de urgencia al hospital.

Sin embargo, el conductor del BMW, en vez de parar y auxiliarle, huyó a gran velocidad en dirección a la autovía V-30, por lo que la Policía solicitó la colaboración ciudadana para dar con él.