La subdelegada del
Gobierno en Málaga, María Gámez, ha dicho a los periodistas que el dispositivo
de rescate trabaja desde "sin descanso" y que el trabajo es
"técnicamente muy complicado", por lo que se analizan "todas las
alternativas posibles para acceder, localizar y rescatar" al pequeño.
En las últimas horas,
los efectivos han hallado una bolsa de chucherías y también han extraído un
vaso del pozo, de unos 25 centímetros de diámetro y 110 metros de profundidad,
aunque por ahora no se ha obtenido ninguna imagen que constate la presencia del
niño.
"Nadie está
preparado exactamente para un rescate en estas condiciones", ha señalado
Gámez, quien ha explicado que no se trata solo de llegar hasta el fondo del
pozo sino de "conservar el hueco por donde se debe rescatar", por lo
que no se desecha ninguna alternativa.
Una de las que se baraja
es la posibilidad de excavar un pozo paralelo, aunque por ahora no se está
llevando a cabo. La información que disponen los servicios de emergencia de que
el menor cayó sobre las 14.00 horas de ayer en este pozo fue facilitada por la
propia familia, que también aseguró que escuchó unos lloros.
Se trata de un orificio
de prospección para buscar agua que se encuentra en una finca privada, cuya
titularidad se desconoce, según ha indicado Gámez, quien tampoco ha precisado
si la oquedad tenía algún tipo de protección.
La subdelegada ha
destacado el esfuerzo de los equipos que trabajan en el rescate, en el que
también colaboran varias empresas, para tratar de localizar al menor, una labor
de "complejidad alta", ha subrayado. Durante toda la noche han estado
trabajando en la zona un centenar de efectivos del 112, Consorcio Provincial de
Bomberos, Protección Civil, el Equipo de Rescate e Intervención de Montaña
(EREIM) de Álora y Granada, submarinistas del instituto armado y bomberos de Málaga
capital.