Desde este jueves todos los ciudadanos mayores de años tendrán la obligación de llevar mascarilla en cualquier espacio público abierto o cerrado si no es posible guardar la distancia de dos metros de seguridad entre personas. Eso sí, existen algunas excepciones contempladas en el BOE com la práctica de deporte, la ingesta de comida o las personas que sufren problemas respiratorios.

Las mascarillas higiénicas y quirúrgicas, las recomendadas por el Gobierno, tienen una vida útil de entre cuatro y ocho horas, pero muchas veces no les damos un uso tan prolongado por lo que se pueden volver a utilizar.

El Consejo General de Enfermería ha elaborado una guía de recomendaciones sobre cómo guardarlas para volverlas a utilizar de forma segura. Las mascarillas deberán ser guardadas en una bolsa independiente transpirable o un sobre de papel siempre en la misma posición para volver a utilizarla. Es desaconsejable usar bolsas de pástico.

En caso de disponer de mascarillas reutilziables, habrá que lavarlas y desinfectarlas para su próximo uso. El Ministerio de Sanidad publicó una guía donde se establecen tres métodos distintos para realizar el lavado:

-El primero de ellos es el lavado y desinfección de las mascarillas con detergente normal y agua a una temperatura de entre 60 y 90 grados y en un ciclo normal de lavadora.

-El segundo se basa en sumergir las mascarillas en un dilución de lejía 1:50 con agua tibia durante 30 minutos. Después lavar con agua y jabón y aclarar bien para eliminar cualquier resto de lejía y dejar secar.

-El tercer método es el uso de cualquiera de los productos virucidas autorizados por el Ministerio de Sanidad para PT2 (uso ambiental) que han pasado la Norma 14476 de actividad virucida y se encuentran registrados para uso por el público en general. Puede consultar la lista de estos productos en el siguiente documento.

Se trata de productos autorizados en su modo de empleo para superficies y que también podrán utilizarse para las mascarillas higiénicas reutilizables, eso si, siguiendo las recomendaciones del fabricante,poniendo especial atención al uso diluido o no del producto y a los tiempos de contacto necesario para la actividad desinfectante.

Tras la finalización de este procedimiento, las mascarillas se lavarán con abundante agua y jabón para eliminar cualquier resto químico y se dejarán secar.

Las enfermeras recuerdan que las mascarillas deben ser unipersonales y no se deben compartir, deben cubrir boca, nariz y barbilla y que la parte de color debe estar hacia fuera. También señalan que no se debe tocar la mascarilla una vez puesta y que no se tiene que quitar para hablar, toser o estornudar. Estas son las instrucciónes para su colocación:

  • Lavarse las manos con agua y jabón o una solución hidroalcohólica antes de manipular la mascarilla
  • Identificar la parte superior de las mascarillas
  • Situar la mascarilla en la cara, a la altura de la nariz y si se dispone de pieza nasal, ajustarla a la nariz
  • Sostener la mascarilla desde el exterior y sujetar el arnés de cabeza detrás de la misma, o a ambos lados de las orejas, sin cruzarlos
  • Bajar la parte inferior de la mascarilla a la barbilla
  • Verificar que las mascarilla cubre la barbilla
  • Pellizcar la pieza nasal con ambas manos para ajustarla a la nariz
  • Verificar que la mascarilla está colocada correctamente: comprobar el sellado y la ausencia de molestias respiratorias
  • Una vez ajustada no tocarla con las manos. Si se necesita tocar la mascarilla debe lavarse las manos con agua y jabón

Para retirar de forma segura la mascarilla hay que seguir cinco pasos establecidos:

  • Lavarse las manos con agua y jabón o frotarlas con una solución hidroalcohólica
  • Retirar la mascarilla sin tocar la parte frontal
  • Desechar la mascarilla en un contenedor provisto de una bolsa de plástico, preferiblemente con tapa y control no manual o en su caso lavar la mascarilla siguiendo las recomendaciones de las autoridades sanitarias.
  • Lavarse las manos con agua y jabón o frotarlas con una solución hidroalcohólica