Un adolescente de 16 años se puso en contacto con la Fundación ANAR, confesándole lo siguiente a uno de sus trabajadores sociales: "He tenido dos intentos de suicidio, además de autolesionarme... Creo que la situación de la cuarentena me está viniendo grande. Llevo un par de días que siento que el mundo se me viene encima".

La entidad recibió más de 166.000 llamadas durante 2020, con una media de seis casos muy graves al día. Se recoge en un informe que analiza cómo la pandemia agravó algunas de las problemáticas que afectan habitualmente a los menores de edad.

Diana Díaz, directora de teléfono y chat de ANAR, nos cuenta que durante el confinamiento, hubo un elevado número de consultas relacionadas con ideaciones e intentos de suicidio. Concretamente, las ideas de suicidio entre niños y adolescentes se incrementaron el año pasado casi en un 250%.

Ana Sánchez-Anegón, CEO de 'El animal emocional', explica que los más jóvenes han estado "expuestos" a un aislamiento que "no es natural" en una edad tan "complicada", en la que la socialización es necesaria. También se han disparado los trastornos de la alimentación, con más de un 800% de casos con respecto al año anterior

"Utilizan mecanismos de autorregulación emocional como las autolesiones", explica Díaz. Por eso, los expertos recomiendan incrementar el número de profesionales infanto-juveniles en el área de salud mental así como que se verbalicen las emociones en el ámbito familiar.