Los principales partidos no han alcanzado todavía un acuerdo para reducir el gasto de 160 millones de euros que supondrá la repetición electoral del 26-J.
Ciudadanos y Podemos han propuesto que todas las papeletas electorales se envíen en el mismo sobre para así ahorrar en la partida que más costó al Estado en las últimas elecciones generales, con casi 50 millones. Sin embargo, el PP se niega a cualquier cambio en el envío de las papeletas por correo y el PSOE está dispuesto a valorarlo.
Pero los ciudadanos no quieren esperar a que los políticos se decidan. La escalofriante cifra gastada en las pasadas elecciones que no ha servido para dar un Gobierno a España provoca malestar y remueve a los españoles en sus sillas: no quieren que el total de los 130 millones vuelvan a ser gastados en otra campaña electoral en un tiempo que no alcanza ni medio año.
Por eso, tanto en los portales de las casas como en las redes sociales han aparecido mensajes en contra de recibir papeletas y que incluso amenazan con no votar a aquellos partidos que envíen su publicidad. Además, en esos mensajes se pueden encontrar propuestas como que el voto sea electrónico o que la inversión que supone el envió de papeletas se dediquen a otros sectores necesitados precisamente de esos fondos: sanidad o educación.
NO quiero sobres con publicidad y papeletas electorales!
— Beatriz Montero (@MonteroBea) 7 de mayo de 2016
Que inviertan ese dinero en sanidad, educación, investigación #Elecciones26J
No quiero recibir papeletas electorales en papel, tenemos otras necesidades: quiero voto electrónico! #STOPpapeletashttps://t.co/Plhux2Ktga
— Xavier Tarrés (@xtarres) 6 de mayo de 2016
Después de cinco meses de debates, negociaciones, entrevistas, promesas, encuentros y desencuentros, los candidatos son conocidos. Rajoy, Rivera, Sánchez, Iglesias y Garzón repetirán su candidatura, pues ningún partido, pese a no haber conseguido una mayoría para gobernar, ha removido a su número uno.
Por eso, los ciudadanos saben quiénes son, saben qué proponen, qué quieren, qué esconden… y son muchos los que aseguran que no necesitan volver a ver su sonrisa congelada en un sobre para decidir a quién votar, pues suficiente retrato de cada uno de ellos ya han visto en estos últimos meses.