Juan Carlos I vive su primer día completo en España desde su vuelta este jueves. Casi dos años después, el rey emérito ha pasado una noche en nuestro país; lo ha hecho en casa de Pedro Campos, su amigo íntimo que también le ha hecho de anfitrión en su visita al Club Náutico de Sanxenxo.
Hemos podido ver a un Juan Carlos ayudado de un bastón para andar, y con una gorra en el coche que después se ha quitado. Pasadas las 12:30 horas, el emérito ha llegado al Club Náutico acompañado por Campos entre cánticos de "viva el rey".
Previamente, ha desayunado con el alcalde de Sanxenxo, Telmo Martín, que confirmó a los medios de comunicación allí presentes que el emérito participará en la regata que tendrá lugar este fin de semana. Además, volverá a España en junio para presenciar el campeonato del mundo que tendrá lugar en verano.
La visita de Juan Carlos I a España ha levantado una enorme expectación a nivel mediático, con más de 200 periodistas acreditados de 100 medios de comunicación distintos para cubrir el evento.
Y es que, casi dos años después, el rey emérito vuelve a España tras estar envuelto en polémicas que han puesto patas arriba a la Casa Real. En marzo, la Fiscalía archivó toda la causa en la que estaba siendo investigado alegando que, para llevarle a juicio faltaban indicios, pero también señalaban otras tres causas como "la prescripción de delitos, la inviolabilidad y la regularización fiscal". Pudo librarse por su inviolabilidad y porque pagó más de cinco millones para regularizar viajes y tarjetas opacas, todo valorado todo en más de diez millones.
Sin embargo, a Juan Carlos I le queda una causa abierta, la denuncia por acoso que presentó Corinna Larsen en Londres. El rey ha intentado librarse de la acusación alegando inviolabilidad, pero el juez lo ha rechazado con la siguiente afirmación: "Significaría que, si mañana, el acusado entrara en una joyería en Hatton Garden y robara un anillo de diamantes, no podría afrontar ningún proceso civil o penal. Rechazo el argumento del demandado".