El rey emérito se ha mostrado sonriente ante las decenas de medios congregados para recibirle en el club náutico de Sanxenxo. Juan Carlos I ha llegado acompañado por su hija la infanta Elena y su amigo Carlos Campos. El exmonarca se ha mostrado agradecido y contento por el recibimiento y se ha acercado a saludar a las personas anónimas que llevaban desde primera hora de la mañana esperando para verle.

Tras pasar su primera noche en la casa de su amigo Campos, el exmonarca se ha trasladado al centro deportivo para pasar el día siguiendo la participación de su barco, el Bribón, en la competición.

Al igual que este jueves, hemos podido ver a un Juan Carlos I ayudado de un bastón para andar. Pasadas las 12:00 horas, el emérito ha llegado al Club Náutico acompañado por Campos. Previamente, había desayunado con el alcalde de Sanxenxo, Telmo Martín, que confirmó a los medios de comunicación allí presentes que el emérito participará en la regata que tendrá lugar este fin de semana. Además, volverá a España en junio para presenciar el campeonato del mundo que tendrá lugar en verano.

El objetivo del emérito era seguir de cerca la primera regata, en la que ha podido ver al Bribón salir vencedor. Tras más de cuatro horas de paseo marítimo, el emérito amarraba visiblemente contento y saludando a su público. Con algunas dificultades para salir del barco, Juan Carlos I requirió la ayuda de algunas personas para lograr salir airoso. Un proceso que se repitió al subir las escaleras del muelle. Ya en tierra firme, ha llegado al aparcamiento.

Apenas se superaban las 18:00 horas cuando Juan Carlos I abandonaba el club náutico en coche, sentado en el asiento del copiloto, saludando a los medios con la mano y deleitándose con el apoyo de los vecinos que se han trasladado allí para recibirlo. Después, el emérito se ha dirigido hacia la casa de su anfitrión, Pedro Campos, donde hemos vuelto a escuchar su voz para expresar que la regata ha sido "muy buena": "Un tiempo estupendo, y fantástica", ha indicado.

Tras el fin de semana en Sanxenxo, está previsto que Juan Carlos I viaje el lunes a Madrid para reunirse con su hijo, el rey Felipe VI. Según hemos podido conocer en laSexta, la habitual agenda diaria que comparte la Casa Real estará completamente vacía de cara al lunes. Y será al final del lunes, desde Madrid, cuando el emérito ponhga rumbo de nuevo a Abu Dabi.

Han pasado casi dos años desde que el 3 de agosto de 2020, el emérito trasladaba por carta a su hijo su marcha de España "con profundo sentimiento, pero con gran serenidad" para así "contribuir a facilitar el ejercicio" de las funciones de Felipe VI como jefe de Estado.

La visita de Juan Carlos I a España ha levantado una enorme expectación a nivel mediático, con más de 200 periodistas acreditados de 100 medios de comunicación distintos para cubrir el evento.

Y es que, casi dos años después, el rey emérito ha regresado a España, en una corta visita, tras estar envuelto en polémicas que han hecho temblar de nuevo los cimientos de la monarquía española. En marzo, y tras tres regularizaciones con Hacienda, la Fiscalía archivó toda la causa en la que estaba siendo investigado alegando que, para llevarle a juicio faltaban indicios, pero también señalaban otras tres causas como "la prescripción de delitos, la inviolabilidad y la regularización fiscal". Pudo librarse por su inviolabilidad y porque pagó más de cinco millones para regularizar viajes y tarjetas opacas, unos gastos valorados en más de diez millones.

Sin embargo, a Juan Carlos I le queda una causa abierta, la denuncia por acoso que presentó Corinna Larsen en Londres. La maquinaria legal del exmonarha ha intentado esquivar la acusación alegando inviolabilidad, pero el juez lo ha rechazado con la siguiente afirmación: "Significaría que, si mañana, el acusado entrara en una joyería en Hatton Garden y robara un anillo de diamantes, no podría afrontar ningún proceso civil o penal. Rechazo el argumento del demandado".