Para Alberto Garzón, la visita de Juan Carlos I a Sanxenxo son "un espectáculo que expresa mejor que nada un concepto de impunidad" de un rey emérito que ha "malogrado todo lo bueno que pudo hacer en su vida".

En Al Rojo Vivo, el ministro de Consumo ha criticado que Juan Carlos I se haya, afirma, "servido de las instituciones del Estado para ser un delincuente acreditado". "En lo personal puede hacer lo que le dé la gana, pero en su gestión de este asunto está la impunidad", agrega.

Para Garzón, el emérito es "suficientemente libre como para no dar explicaciones" ni para "introducir la ética ni la decencia con un país con dos crisis en la última década mientras él vive a cuerpo de rey".