El PSOE está decidido a modificar la ley orgánica de garantía integral de la libertad sexual, conocida popularmente como ley del 'solo sí es sí'. Así lo ha expresado este mismo lunes, horas después de que se conocieran las intenciones de los socialistas de introducir cambios en la norma, el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, que ha planteado una modificación en la que, no obstante, se mantendrá "el consentimiento en el centro", dado que es "la clave de la ley" y será también "la clave de la reforma". Bolaños ha arrancado su intervención recordando que esta es "una ley positiva", dado que "ahora hay comportamientos delictivos que ahora tienen reproche y antes no".

No obstante, ha matizado en la misma línea que lleva haciendo el Gobierno desde este domingo: "Ha habido efectos indeseados y que hay preocupación social. Por eso, vamos a modificar la ley para paliarlos. Es una reforma legal que no sencilla". En este sentido, Bolaños ha indicado que "ya hay propuesta del Ministerio de Justicia", y que "en ese sentido debe trabajar todo el Gobierno". La propuesta del departamento de Justicia pasaría, en líneas generales, por recuperar las penas del Código Penal anterior a la entrada en vigor de la ley del 'solo sí es sí', como fórmula para frenar la revisión de penas a la baja en los casos más graves.

Según informó Cadena SER, la cartera dirigida por Pilar Llop estaba valorando recuperar las penas de entre uno y cinco años cuando haya violencia, intimidación o se haya anulado la voluntad de la víctima, y de entre seis y 12 años en esos mismos casos cuando la agresión sexual sea con penetración. Del mismo modo, en los supuestos en que haya agravantes también se volvería a las penas anteriores, de entre cinco y diez años cuando no haya penetración, y de entre 12 y 15 cuando sí la haya. Aun así, según han trasladado a la agencia EFE fuentes de Justicia, no hay por el momento ningún documento sobre la mesa que se pueda analizar en el seno del Gobierno de coalición.

Abordar con responsabilidad esta situación, han incidido desde Moncloa, requiere detenimiento, porque es compleja. "Justicia sigue trabajando desde el punto de vista técnico y de manera rigurosa", han señalado desde el departamento que dirige Llop, aunque han reiterado que no tienen "ninguna propuesta definitiva ni borrador". Ello no ha impedido a la parte socialista del Gobierno rechazar, casi de forma instantánea, las diez medidas "urgentes" que proponía muy poco antes Igualdad como alternativa a la revisión de penas de la ley del 'solo sí es sí'.

Justicia rechaza el plan de Igualdad

Diez medidas que desde Unidas Podemos consideran imprescindibles "para frenar cualquier intento de la derecha para volver al modelo anterior, basado en la violencia y la intimidación, y que exigía a las mujeres pasar por un calvario probatorio para poder demostrar las violencias sexuales ejercidas contra ellas". "Como afirman todos los expertos, y ha constatado el propio Gobierno de coalición, no existe ninguna reforma penal de la ley que pueda frenar las revisiones, ya que son consecuencia de la incorrecta aplicación del derecho transitorio y de la propia ley", advirtió la confluencia de fuerzas del bloque morado a primera hora de la mañana de este lunes, dando pie a las siguientes propuestas:

El modelo anterior, al que quiere volver Justicia (PSOE) y también el PP, es tachar el consentimiento, tachar el 'solo sí es sí'"

Pablo Echenique (Unidas Podemos)

Estas eran las iniciativas planteadas por la cartera de Irene Montero, y así respondía horas después la ministra portavoz, Isabel Rodríguez: "Cualquier recurso adicional es bienvenido, pero estamos hablando de que en la aplicación se ha producido una interpretación distinta de las penas que estaba permitiendo en algunos casos su revisión a la baja". Ha subrayado así que "lo problemático no ha estado tanto en los recursos sino en la interpretación que se ha hecho del régimen transitorio" en los pronunciamientos judiciales. "Es ahí donde está la raíz del problema, no en ningún otro asunto de la norma".

Este planteamiento, sin embargo, tampoco convence nada a la otra parte del Gobierno de coalición. Antes de conocerse el anuncio de Bolaños, desde Unidas Podemos ya se afirmaba que el PSOE estaba sufriendo presiones para volver al modelo anterior. Una valoración que cobraba vida con el duro mensaje publicado en Twitter por el portavoz parlamentario de Unidas Podemos, Pablo Echenique: "El modelo anterior, al que quiere volver Justicia (PSOE) y también el PP, es el que preguntaba a las víctimas: '¿Cerraste fuerte las piernas? ¿Cuánto habías bebido? ¿Te jugaste la vida pegándole puñetazos?' Es tachar el consentimiento, tachar el 'solo sí es sí'".

Unas críticas a las que el PSOE prefiere no hacer frente en este momento: "Lo que diga Unidas Podemos u otros partidos en relación a la posición del PSOE lo definirá la portavoz del PSOE y los compañeros del partido. No hablo en nombre del PSOE, sino del Gobierno, y ya ha quedado claro que el consentimiento está en el centro, está en el corazón de la reforma. Pero hay una preocupación social por estos efectos indeseados que hay que atender", ha zanjado la ministra de Industria y futura candidata a la Alcaldía de Madrid, Reyes Maroto, en declaraciones a Al Rojo Vivo, donde ha insistido en que, aunque la ley "supone sin duda un avance de las mujeres, es importante trabajar por cambiar aspectos para garantizar de forma reforzada la protección de las mujeres".

Precisamente, unos minutos después se ha manifestado la portavoz socialista, Pilar Alegría, matizando que la nueva fórmula "se va a sustanciar en un aumento de las penas". En esta línea, ha dejado clara la posición del Partido Socialista respecto a las negociaciones con Unidas Podemos para corregir la parte más polémica de la norma: "El primer paso es ir conjuntamente con Podemos. Si no se da esa negociación positiva, el PSOE dará un paso adelante". Es decir, que en las filas socialistas tiene previsto llevar a cabo esa modificación con o sin sus socios de Gobierno. ¿Cuentan con apoyos para efectuar esa corrección?

Feijóo garantiza el apoyo del PP

En medio de este nuevo cisma en el Gobierno de coalición se han colado los populares, que han mostrado públicamente su apoyo al Ejecutivo si este se decide finalmente a retocar la ley de garantía integral de la libertad sexual. Así lo ha expresado, poco después del anuncio de Bolaños, el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo: "Incluso una vez que se modifique o rectifique, todo aquello con anterioridad a la entrada en vigor a esa rectificación ya no podemos subsanarlo. Pero ante un error de esta magnitud no caben más discusiones ni negociaciones. Lo único que cabe es una modificación inmediata para reparar la dignidad de las víctimas modificando la ley del 'solo sí es sí'".

"Si Sánchez no encuentra para eso a su socio de Gobierno, encontrará a la alternativa que representamos", ha apuntado Feijóo, que se ha expresado de forma clara ante esta cuestión: "Le garantizo (a Sánchez) el rigor que no tiene en su Consejo de Ministros, el sentido de Estado que no tiene en sus apoyos parlamentarios, y la sensibilidad que no ha demostrado con las mujeres españolas víctimas de violencia de género en los últimos meses. Por tanto, le garantizo el apoyo a la modificación de la ley del 'solo sí es sí' de forma inmediata, tenga o no votos en su Consejo de Ministros o en el Congreso de los Diputados".

Hasta este lunes, 280 condenados por delitos sexuales se han beneficiado por el nuevo marco de penas que recoge la ley del 'solo sí es sí', entre revisiones de condena a la baja y sentencias posteriores en aplicación de la norma. Además, se ha ordenado la excarcelación de 22 personas. En los 278 casos registrados, los magistrados explican que estas revisiones y rebajas de condenas se hacen porque el propio Código Penal, en su artículo 2.2, establece que siempre deberá aplicarse la ley "más favorable" al reo. En este contexto, la ley ha provocado que el delito de agresión sexual absorba al de abuso sexual, lo que significa que un delito que hasta ahora recogía una conducta más grave incorpore una de menor gravedad, por lo que la horquilla penal también se ha ampliado para abarcar todo el abanico de comportamientos penados ahora como agresión sexual.