La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha expresado el agradecimiento de su partido hacia el rey Juan Carlos y ha subrayado que el proceso de su sucesión se desarrollará con "absoluta normalidad" dentro de un contexto de "estabilidad institucional garantizado por la Constitución".
Cospedal ha leído una declaración institucional en nombre de su partido con motivo del anuncio de la abdicación del rey, en la que ha subrayado que el progreso de la nación y la democracia española no pueden entenderse sin la figura de Don Juan Carlos, y también ha señalado que el príncipe de Asturias es la persona "más preparada" para sucederle.
"Hoy es un día histórico y de agradecimiento, el de 47 millones de españoles hacia la figura que mejor ha sabido defender el país y los intereses de todos españoles estos últimos 39 años". Con esta frase ha comenzado Cospedal esta declaración. El rey, ha dicho, "ha sabido serlo de todos los españoles", ha sido el "referente de todos" en momentos clave como la Transición pero también después, y "siempre ha representado el necesario punto de encuentro para que la convivencia de todos los españoles fuera posible".
Así, ha señalado que si España es uno de los países "con mayor desarrollo económico y social del mundo" se debe en una parte "no pequeña" al rey. "Si somos el país que somos se lo debemos en gran medida a la capacidad de consenso, diálogo y responsabilidad que siempre ha encarnado el Monarca, ha añadido Cospedal, para quien Don Juan Carlos es "mucho más que un personaje histórico" y por eso es muy complicado hoy resumir su aportación, para ello se necesitará "mucho tiempo".
Como "un jefe de Estado equilibrado, representativo y cercano, más allá de las crisis económicas y sociales y de acontecimientos de todo tipo", ha definido al monarca la número dos del PP y presidenta de Castilla-La Mancha. Y ha puesto en valor que en todos estos años Don Juan Carlos ha contado con "la ayuda inestimable y el apoyo" de la reina Sofía.
Por otro lado, Cospedal ha puesto el énfasis en la "absoluta normalidad" en la que se va a desarrollar el proceso sucesorio, en un contexto de "estabilidad institucional garantizada por la Constitución". Este país, ha añadido, ha demostrado ser "lo suficientemente maduro" para afrontar la sucesión "con serenidad y altura de miras", ha añadido la presidenta castellanomanchega.