El pleno del Congreso debate la toma en consideración de la iniciativa impulsada por el PP y el PSOE para reformar el artículo 49 de la Constitución y eliminar el término 'disminuidos' para sustituirlo por 'personas con discapacidad'. Para aprobar la que será la primera reforma social de la Carta Magna, reclamada durante décadas por la entidades de la discapacidad, se requiere el apoyo de una mayoría de al menos tres quintos de la cámara, que está garantizada por la representación de socialistas y populares, por lo que no se esperan sorpresas.

Al realizarse la reforma por tramitación directa y en lectura única, tras el debate del pleno se abrirá un plazo para presentar enmiendas -ya anunciadas al menos por PNV y Compromis- y está previsto su aprobación en el debate que acaba de dar comienzo en el Congreso para su remisión al Senado.

El líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, ha comenzado el debate recordando que "las palabras importan" y que la Cámara Baja está "llamada a dar un ejemplo de política de verdad que vale la pena, alejada de la refriega y los intereses personales". Así, ha asegurado que la reforma de este artículo es una modificación "adecuada y prometida".

Por su parte, Compromís -integrado en Sumar- ha reclamado en una enmienda recuperar el Derecho Civil valenciano, mientras que el PNV va a pedir incluir en la Constitución el derecho a decidir de Euskadi. También ERC estudia presentar alguna propuesta, pero relativa al artículo 49.

No se espera que ninguna sea aceptada ya que el PP y el PSOE pactaron que solo se aceptarían de común acuerdo y que, en cualquier caso, los cambios en la Carta Magna se ceñirían al artículo 49. Las entidades sociales han reclamado a los grupos que apoyen por unanimidad el cambio constitucional, que Vox ya ha desvelado que no va a apoyar.