La ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá, ha propuesto que de cara al curso educativo 202/21 se trate de "no mezclar mucho" a los alumnos de diferentes etapas, de tal manera que si hay un rebrote en el centro sea más sencillo "perimetrar" el foco.

Además, Celaá, que ha comparecido en la Comisión de Educación en el Senado, ha defendido que el curso que viene se iniciará en septiembre "con la mayor presencialidad posible", pero estando preparados los centros para esos posibles rebrotes. Así, ha explicado que "todos los espacios educativos a disposición de los alumnos", y este aprovechamiento de los espacios ayudaría a mantener la distancia social.

"Tendremos que observar cuestiones como la compartimentación y no mezclar mucho las etapas por si se produce un brote y es preciso perimetrar el lugar del brote", ha detallado la ministra.

La dirigente socialista también ha querido señalar que toda Europa vive los mismos problemas en cuanto a la reorganización de los centros escolares, y ha indicado que el regreso a las aulas debe hacerse con precaución. "En Israel no está saliendo bien, en Dinamarca sí", ha ejemplificado. Por ello, ha explicado que tanto desde su Ministerio como desde las comunidades autónomas preparan una 'vuelta al cole' pensando en "absolutamente todas las posibilidades" en las que puede evolucionar la pandemia.

La ministra también ha hecho hincapié en que no se cerraron las escuelas en marzo "porque hemos querido", sino que tanto el cierre como la apertura de los colegios tienen que ver con un "motivo sanitario".

Planes de contingencia

En el plan en el que trabaja Educación junto con las comunidades autónomas, plantea una serie de medidas para adaptar la enseñanza al coronavirus. De esta manera, en el caso de que se produjese un nuevo rebrote, el sistema educativo estaría mejor preparado para afrontar la crisis y continuar con la enseñanza.

Entre las medidas planteadas, se encuentra la de aprovisionar a los centros educativos de dispositivos electrónicos que garanticen que en un momento dado todo el alumnado tiene acceso a la educación online.

Hay otros aspectos de este proyecto que tienen que ver con prevenir los contagios en los propios centros: con material higiénico y sanitario suficiente para el alumnado y los trabajadores, o la limitación del aforo en las aulas y otros espacios de los centros.