Arrestos, incidentes y noches más tranquilas en Los Ángeles tras seis días de protestas contra las redadas de Trump

Ya son seis días consecutivos en los que las calles de Los Ángeles claman contra las redadas masivas de migrantes de Donald Trump entre disturbios que han provocado múltiples arrestos este miércoles. Eso sí, con la imposición del toque de queda en el centro de la ciudad californiana se ha vivido una noche mucho más tranquila que las anteriores. Ahora, tras una fase de entrenamiento está previsto que los 700 marines de Trump se suman a los soldados de la Guardia Nacional desplegados. Respecto a ellos, se ha conocido que los militares pueden detener civiles, aunque no arrestarlos.

En relación a los incidentes, dos vehículos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) tuvieron que embestir a un automóvil en un barrio del este de Los Ángeles, donde viajaba un sospechoso de golpear a un agente migratorio. El Departamento de Seguridad Interna (DHS) publicó en su cuenta de X un video con las imágenes del operativo, explicando que no se había tratado de un incidente de atropello y fuga. "Fue un arresto selectivo de un alborotador violento que golpeó a un oficial de la CBP", añadió el DHS, sobre la detención de Christian Damian Cerno-Camacho.

"Cuando las protestas se convierten en violencia, las sanciones serán severas"

Además, este miércoles el Departamento de Justicia anunció cargos federales contra al menos 14 personas que supuestamente participaron en actos vandálicos en los últimos días en Los Ángeles. Los cargos incluyen acusaciones de agresiones a agentes, posesión de artefactos explosivos y conspirar para impedir arrestos.

En ese sentido, el fiscal federal Bill Essayli explicó en un comunicado que "cuando las protestas se convierten en violencia, las sanciones serán severas". Por eso, advirtió que poseer un cóctel molotov u otro dispositivo destructivo se castiga con hasta diez años de prisión federal. Asimismo, lamentó que "los atroces ataques, como los alegados en estas denuncias, podrían haber causado lesiones que cambiaron o acabaron con la vida de agentes y transeúntes inocentes".

Poder de detención para los militares

Por su parte, el mayor general Scott Sherman, comandante a cargo del operativo militar en Los Ángeles, ha explicado que con el fin de contener las protestas tras las redadas migratorias tienen autorización para detener temporalmente a civiles. "Estrictamente para la protección del personal federal y la protección del edificio federal, se les permite detener temporalmente y esperar a que las fuerzas del orden puedan venir y arrestarlos", apuntó en una rueda de prensa con medios nacionales.

Además, Sherman, quien coordina el despliegue de 4.000 soldados de la Guardia Nacional y 700 marines en Los Ángeles, recalcó que cerca de 500 soldados han sido entrenados para acompañar a los agentes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) en operativos migratorios. Redadas masivas que no cesan, pese a las protestas que ya ha llegado a otros puntos del país. De hecho, este martes el ICE publicó fotos en su cuenta de X de soldados de la Guardia Nacional proporcionando seguridad a los agentes durante los operativos.

Por otro lado, este cargo militar también ha detallado que los marines actualmente están recibiendo un entrenamiento especializado en la Estación Naval de Armas de Seal Beach, enfocado en técnicas de manejo de multitudes, ajenas a sus funciones tradicionales. Según recoge Europa Press, podrían sumarse a los soldados de la Guardia Nacional en 48 horas. En definitiva, un despliegue militar ordenado por Trump, el cual supone 134 millones de dólares de coste, y una guerra política con las autoridades californianas.