Durante las primeras rondas de los torneos, las primeras rondas se suelen jugar también en pistas exteriores para disputar más encuentros. Estos campos suelen ser contiguos, como es el caso del torneo canadiense. Esto llevo a una surrealista imagen: una bola fue pasando entre dos pistas causando una enorme confusión entre todo el mundo.

Santiago González y Andrés Molteni jugaban en la pista 5 su partido de primera ronda de dobles ante los colombianos Robert Farah y Juan Sebastián Cabal. Durante uno de los puntos, un remate fue tan fuerte que la bola salió del campo, cayendo en la pista 9, contigua a ésta. Allí estaban jugado su partido de segunda ronda el español Albert Ramos y el argentino Diego Schwartzmann. La bola cayó justo durante un punto mientras Ramos golpeaba la pelota de su partido, y el juez de silla paró el punto (que luego tuvieron que repetir).

Como la bola no pertenecía a esa pista, el español antes de sacar de nuevo decidió devolverla a su campo de procedencia. Allí tuvieron la suerte que acababa de finalizar el punto y no les interrumpió, pero se quedaron sorprendidos de la aparición de la bola. Sin caer en la cuenta que era la que ellos mismos habían mandado fuera, volvieron a devolverla a la pista 9 (por segunda vez).

Albert Ramos se disponía a servir cuando volvió a caer la bola, lo que provocó la risa del público. Para acabar con la surrealista situación, el juez de silla decidió quedarse la famosa bola y ambos partidos pudieron continuar sin mayores problemas.